20
Luego Balaam miró hacia el pueblo de Amalec y dio este mensaje:
«Amalec fue la más importante de las naciones,
¡pero su destino es la destrucción!».
21
Después miró hacia los ceneos y transmitió el siguiente mensaje:
«Su casa está segura;
su nido está entre las rocas.
22
Pero los ceneos serán destruidos
cuando Asiria
los lleve cautivos».
23
Balaam concluyó sus mensajes con estas palabras:
«¡Ay!, ¿quién puede sobrevivir
a menos que Dios lo disponga?
24
Naves vendrán de las costas de Chipre;
y oprimirán a Asiria y afligirán a Heber,
pero ellos también serán destruidos por completo».
25
Entonces Balaam y Balac regresaron cada uno a su casa.