5 Entonces el Señor
volvió a hablar conmigo y me dijo:
6 «Mi cuidado del pueblo de Judá es como el delicado fluir de las aguas de Siloé, pero ellos lo han rechazado. Se alegran por lo que les sucederá al
rey Rezín y al rey Peka.
7 Por lo tanto, el Señor los arrollará con una poderosa inundación del río Éufrates,
el rey de Asiria con toda su gloria. La inundación desbordará todos los canales
8 y cubrirá a Judá hasta la barbilla. Extenderá sus alas y sumergirá a tu tierra de un extremo al otro, oh Emanuel.
9 »Reúnanse, naciones, y llénense de terror.
Escuchen, todas ustedes, tierras lejanas:
prepárense para la batalla, ¡pero serán aplastadas!
Sí, prepárense para la batalla, ¡pero serán aplastadas!
10 Convoquen a sus asambleas de guerra, pero no les servirán de nada;
desarrollen sus estrategias, pero no tendrán éxito,
¡porque Dios está con nosotros!».
11 Un llamado a confiar en el Señor
El Señor
me dio una firme advertencia de no pensar como todos los demás. Me dijo:
12 «No llames conspiración a todo, como hacen ellos,
ni vivas aterrorizado de lo que a ellos les da miedo.
13 Ten por santo en tu vida al Señor
de los Ejércitos Celestiales;
él es a quien debes temer.
Él es quien te debería hacer temblar.
14 Él te mantendrá seguro.
En cambio, para Israel y Judá
será una piedra de tropiezo;
una roca que los hace caer.
Y para el pueblo de Jerusalén
será una red y una trampa.
15 Muchos tropezarán y caerán
y no volverán a levantarse;
caerán en la trampa y serán capturados».
16 Preserva las enseñanzas de Dios;
confía sus instrucciones a quienes me siguen.
17 Yo esperaré al Señor
,
que se ha apartado de los descendientes de Jacob;
en él pondré mi esperanza.
18 Yo y los hijos que el Señor
me ha dado servimos como señales y advertencias a Israel de parte del Señor
de los Ejércitos Celestiales, quien habita en su templo en el monte Sión.
19 Tal vez alguien les diga: «Preguntemos a los médiums y a los que consultan los espíritus de los muertos; con sus susurros y balbuceos nos dirán qué debemos hacer». Pero ¿acaso no deberá el pueblo pedirle a Dios que lo guíe? ¿Deberían los vivos buscar orientación de los muertos?
20 ¡Busquen las instrucciones y las enseñanzas de Dios! Quienes contradicen su palabra están en completa oscuridad.
21 Irán de un lugar a otro, fatigados y hambrientos. Y porque tienen hambre, se pondrán furiosos y maldecirán a su rey y a su Dios. Levantarán la mirada al cielo
22 y luego la bajarán a la tierra, pero dondequiera que miren habrá problemas, angustia y una oscura desesperación. Serán lanzados a las tinieblas de afuera.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Isaías 8:5 Y volvió el SEÑOR a hablarme de nuevo, diciendo:

English Standard Version ESV

Isaiah 8:5 The LORD spoke to me again:

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Isaías 8:5 Otra vez me tornó el SEÑOR a hablar, diciendo

King James Version KJV

Isaiah 8:5 The LORD spake also unto me again, saying,

New King James Version NKJV

Isaiah 8:5 The Lord also spoke to me again, saying:

Nueva Versión Internacional NVI

Isaías 8:5 El SEÑOR volvió a decirme:

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Isaías 8:5 Otra vez tornó Jehová á hablarme, diciendo:

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Isaías 8:5 Otra vez me tornó el SEÑOR a hablar, diciendo:

Herramientas de Estudio para Isaías 8:5-22