15
—Mi señor, por favor, escúcheme. El campo vale cuatrocientas monedas
de plata, ¿pero qué es eso entre amigos? Vaya y entierre a su esposa.
16
Abraham estuvo de acuerdo con el precio sugerido por Efrón y pagó la cantidad total: cuatrocientas monedas de plata, pesadas según la norma de los comerciantes; y los ancianos hititas presenciaron la transacción.
17
Así fue que Abraham compró la parcela que pertenecía a Efrón en Macpela, cerca de Mamre. La parcela constaba del campo, la cueva y todos los árboles que la rodeaban.
18
Se transfirió a Abraham como posesión permanente en presencia de los ancianos hititas, en la puerta de la ciudad.
19
Después Abraham enterró a su esposa, Sara, allí en Canaán, en la cueva de Macpela, cerca de Mamre (también llamado Hebrón).
20
Así que el campo y la cueva de los hititas pasaron a manos de Abraham, para ser usados como lugar de sepultura permanente.