7
»Sin embargo, si el hombre se niega a casarse con la viuda de su hermano, ella deberá ir a la puerta de la ciudad y decirles a los ancianos allí reunidos: “El hermano de mi esposo se niega a preservar el nombre de su hermano en Israel: se niega a cumplir con los deberes de un cuñado al no casarse conmigo”.
8
Entonces los ancianos de la ciudad lo llamarán y hablarán con él. Si aun así se niega y dice: “No quiero casarme con ella”,
9
la viuda se acercará a él en presencia de los ancianos, le quitará la sandalia del pie y le escupirá la cara. Luego declarará: “Esto es lo que le pasa a un hombre que se niega a darle hijos a su hermano”.
10
A partir de entonces, todo Israel se referirá a su familia como “¡la familia del hombre al que le quitaron la sandalia!”.
11
»Si dos israelitas se enredan en una pelea, y la mujer de uno de ellos trata de rescatar a su marido agarrando al otro hombre de los testículos,
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tendrás que cortarle la mano. No le muestres compasión.
13
»Usa balanzas exactas cuando tengas que pesar mercadería,
14
y que tus medidas sean completas y legítimas.
15
Así es, usa siempre pesas y medidas legítimas para que disfrutes de una larga vida en la tierra que el Señor
tu Dios te da.
16
Todo el que engaña con pesas y medidas falsas es detestable a los ojos del Señor
tu Dios.
17
»Nunca te olvides de lo que los amalecitas te hicieron cuando salías de Egipto.