27
»Enviaré mi terror delante de ti y sembraré pánico entre todos los pueblos de las tierras que invadas. Haré que todos tus enemigos den la vuelta y salgan corriendo.
28
Mandaré terror
delante de ti para expulsar a los heveos, a los cananeos y a los hititas;
29
pero no los expulsaré a todos en un solo año, porque la tierra quedaría desierta y los animales salvajes se multiplicarían y serían una amenaza para ti.
30
Los expulsaré poco a poco, hasta que tu población aumente lo suficiente para tomar posesión de la tierra.
31
Y estableceré los límites de tu territorio desde el mar Rojo hasta el mar Mediterráneo,
y desde el desierto oriental hasta el río Éufrates.
Entregaré en tus manos a los pueblos que ahora viven en esa tierra, y tú los expulsarás a tu paso.
32
»No hagas tratados con ellos ni con sus dioses.
33
Ninguno de ellos deberá vivir en tu tierra, porque te harán pecar contra mí. Si sirves a sus dioses, quedarás apresado en la trampa de la idolatría».