23 ¿por qué no depositaste mi dinero en el banco? Al menos hubiera podido obtener algún interés de él”.
24 »Luego, dirigiéndose a los otros que estaban cerca, el rey ordenó: “Quiten el dinero de este siervo y dénselo al que tiene cinco kilos”.
25 »“Pero amo —le dijeron—, él ya tiene cinco kilos”.
26 »“Sí —respondió el rey—, y a los que usan bien lo que se les da, se les dará aún más; pero a los que no hacen nada se les quitará aun lo poco que tienen.
27 En cuanto a esos enemigos míos que no querían que yo fuera su rey, tráiganlos y ejecútenlos aquí mismo en mi presencia”».
28 Entrada triunfal de Jesús
Después de contar esa historia, Jesús siguió rumbo a Jerusalén, caminando delante de sus discípulos.
29 Al llegar a las ciudades de Betfagé y Betania, en el monte de los Olivos, mandó a dos discípulos que se adelantaran.
30 —les dijo—.
31 Si alguien les pregunta: “¿Por qué desatan al burrito?”, simplemente digan: “El Señor lo necesita”».
32 Así que ellos fueron y encontraron el burrito tal como lo había dicho el Señor.
33 Y, efectivamente, mientras lo desataban, los dueños les preguntaron:
—¿Por qué desatan ese burrito?
34 Y los discípulos simplemente contestaron:
—El Señor lo necesita.
35 Entonces le llevaron el burrito a Jesús y pusieron sus prendas encima para que él lo montara.
36 A medida que Jesús avanzaba, la multitud tendía sus prendas sobre el camino delante de él.
37 Cuando llegó a donde comienza la bajada del monte de los Olivos, todos sus seguidores empezaron a gritar y a cantar mientras alababan a Dios por todos los milagros maravillosos que habían visto.
38 «¡Bendiciones al Rey que viene en el nombre del Señor
!
¡Paz en el cielo y gloria en el cielo más alto!»
.
39 Algunos de los fariseos que estaban entre la multitud decían:
—¡Maestro, reprende a tus seguidores por decir cosas como esas!
40 Jesús les respondió:
41 Jesús llora por Jerusalén
Al acercarse a Jerusalén, Jesús vio la ciudad delante de él y comenzó a llorar, diciendo:
42 «¡Cómo quisiera que hoy tú, entre todos los pueblos, entendieras el camino de la paz! Pero ahora es demasiado tarde, y la paz está oculta a tus ojos.
43 No pasará mucho tiempo antes de que tus enemigos construyan murallas que te rodeen y te encierren por todos lados.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Lucas 19:23 "Entonces, ¿por qué no pusiste mi dinero en el banco, y al volver yo, lo hubiera recibido con los intereses?"

English Standard Version ESV

Luke 19:23 Why then did you not put my money in the bank, and at my coming I might have collected it with interest?'

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Lucas 19:23 ¿por qué, no diste mi dinero al banco, y yo viniendo lo recibiera con el logro

King James Version KJV

New King James Version NKJV

Luke 19:23 Why then did you not put my money in the bank, that at my coming I might have collected it with interest?'

Nueva Versión Internacional NVI

Lucas 19:23 Entonces, ¿por qué no pusiste mi dinero en el banco, para que al regresar pudiera reclamar los intereses?”

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Lucas 19:23 ¿Por qué, no diste mi dinero al banco, y yo viniendo lo demandara con el logro?

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Lucas 19:23 ¿por qué, no diste mi dinero al banco, y yo viniendo lo recibiera con el logro?

Herramientas de Estudio para Lucas 19:23-43