1 Las langostas invaden como un ejército
¡Toquen alarma en Jerusalén!
¡Den el grito de guerra en mi monte santo!
Que todos tiemblen de miedo
porque está cerca el día del Señor
.
2 Es un día de oscuridad y penumbra,
un día de nubes densas y sombras profundas.
De repente, como el amanecer se extiende sobre las montañas,
aparece un ejército grande y poderoso.
Nunca antes se había visto algo semejante,
ni volverá a verse jamás.
3 Fuego va delante del ejército
y llamas detrás.
Delante de ellos, la tierra se extiende
tan hermosa como el jardín del Edén.
Detrás solo queda desolación;
nada escapa.
4 Parecen caballos;
van a la carga como caballos de guerra.
5 Mírenlos saltar a lo largo de las cumbres.
Escuchen el estruendo que producen, como el retumbar de carros de guerra,
como el rugir del fuego que arrasa los campos de hierba seca
o el despliegue de un poderoso ejército en batalla.
6 El miedo se apodera de la gente;
cada rostro palidece de terror.
7 Los agresores marchan como guerreros
y escalan los muros de la ciudad como soldados.
Marchan hacia adelante,
sin romper filas.
8 No se empujan unos a otros;
cada uno se mueve en la posición exacta.
Atraviesan las líneas de defensa
sin perder la formación.
9 Irrumpen en la ciudad,
corren a lo largo de sus muros.
Se meten en todas las casas;
como ladrones trepan por las ventanas.
10 La tierra tiembla mientras avanzan
y los cielos se estremecen.
El sol y la luna se oscurecen
y las estrellas dejan de brillar.
11 El Señor
va a la cabeza de la columna;
con un grito los guía.
Este es su ejército poderoso
y ellos siguen sus órdenes.
El día del Señor
es algo imponente y pavoroso.
¿Quién lo podrá sobrevivir?
12 Un llamado al arrepentimiento
Por eso dice el Señor
:
«Vuélvanse a mí ahora, mientras haya tiempo;
entréguenme su corazón.
Acérquense con ayuno, llanto y luto.
13 No se desgarren la ropa en su dolor
sino desgarren sus corazones».
Regresen al Señor
su Dios,
porque él es misericordioso y compasivo,
lento para enojarse y lleno de amor inagotable.
Está deseoso de desistir y no de castigar.
14 ¿Quién sabe? Quizá les suspenda el castigo
y les envíe una bendición en vez de esta maldición.
Quizá puedan ofrendar grano y vino
al Señor
su Dios, como lo hacían antes.
15 »¡Toquen el cuerno de carnero en Jerusalén!
Proclamen un tiempo de ayuno;
convoquen al pueblo
a una reunión solemne.
16 Reúnan a toda la gente:
ancianos, niños y aun los bebés.
Llamen al novio de su habitación
y a la novia de su cuarto de espera.
17 Que los sacerdotes, quienes sirven en la presencia del Señor
,
se levanten y lloren entre la entrada del templo y el altar.
Que oren: “¡Perdona a tu pueblo, Señor
!
No permitas que tu preciada posesión se convierta en objeto de burla.
No dejes que lleguen a ser la burla de los extranjeros incrédulos que dicen:
“¿Los ha abandonado el Dios de Israel?”».
18 El Señor
promete restauración
Entonces el Señor
se compadecerá de su pueblo
y guardará celosamente el honor de su tierra.
19 El Señor
responderá:
«¡Miren!, les envío grano, vino nuevo y aceite de oliva,
suficiente para satisfacer sus necesidades.
Ya no serán objeto de burla
entre las naciones vecinas.
20 Expulsaré a esos ejércitos que vienen del norte.
Los enviaré a tierra árida y desolada.
Los que van a la vanguardia serán arrojados al mar Muerto,
y los de la retaguardia al Mediterráneo.
El hedor de sus cuerpos en descomposición se elevará sobre la tierra».
¡Realmente el Señor
ha hecho grandes cosas!
21 No temas, pueblo mío.
Alégrate ahora y regocíjate
porque el Señor
ha hecho grandes cosas.
22 No teman, animales del campo,
porque pronto los pastos del desierto recobrarán su verdor.
Los árboles volverán a colmarse de fruto;
las higueras y las vides se llenarán una vez más.
23 ¡Alégrense, habitantes de Jerusalén!
¡Alégrense en el Señor
su Dios!
Pues la lluvia que él envía demuestra su fidelidad.
Volverán las lluvias de otoño,
así como las de primavera.
24 El grano volverá a amontonarse en los campos de trillar
y los lagares desbordarán de vino nuevo y aceite de oliva.
25 El Señor
dice: «Les devolveré lo que perdieron
a causa del pulgón, el saltamontes,
la langosta y la oruga.
Fui yo quién envió ese gran ejército destructor en contra de ustedes.
26 Volverán a tener toda la comida que deseen
y alabarán al Señor
su Dios,
que hace esos milagros para ustedes.
Nunca más mi pueblo será avergonzado.
27 Entonces sabrán que yo estoy en medio de mi pueblo Israel,
que yo soy el Señor
su Dios, y que no hay otro.
Nunca más mi pueblo será avergonzado.
28 El Señor
promete su Espíritu
»Entonces, después de hacer todas esas cosas,
derramaré mi Espíritu sobre toda la gente.
Sus hijos e hijas profetizarán.
Sus ancianos tendrán sueños
y sus jóvenes tendrán visiones.
29 En esos días derramaré mi Espíritu
aun sobre los sirvientes, hombres y mujeres por igual.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Joel 2:1 Tocad trompeta en Sion, y sonad alarma en mi santo monte. Tiemblen todos los habitantes de la tierra, porque viene el día del SEÑOR, porque está cercano;

English Standard Version ESV

Joel 2:1 Blow a trumpet in Zion; sound an alarm on my holy mountain! Let all the inhabitants of the land tremble, for the day of the LORD is coming; it is near,

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Joel 2:1 Tocad shofar en Sion, y pregonad en mi santo monte; tiemblen todos los moradores de la tierra; porque viene el día del SEÑOR, porque está cercano

King James Version KJV

Joel 2:1 Blow ye the trumpet in Zion, and sound an alarm in my holy mountain: let all the inhabitants of the land tremble: for the day of the LORD cometh, for it is nigh at hand;

New King James Version NKJV

Joel 2:1 Blow the trumpet in Zion, And sound an alarm in My holy mountain! Let all the inhabitants of the land tremble; For the day of the Lord is coming, For it is at hand:

Nueva Versión Internacional NVI

Joel 2:1 Toquen la trompeta en Sión;den la voz de alarma en mi santo monte.Tiemblen todos los habitantes del país,pues ya viene el día del SEÑOR;en realidad ya está cerca.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Joel 2:1 TOCAD trompeta en Sión, y pregondad en mi santo monte: tiemblen todos los moradores de la tierra; porque viene el día de Jehová, porque está cercano.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Joel 2:1 Tocad trompeta en Sion, y pregonad en mi santo monte; tiemblen todos los moradores de la tierra; porque viene el día del SEÑOR, porque está cercano.

Herramientas de Estudio para Joel 2:1-29