Jueces 8:26
Y fue el peso de los zarcillos de oro que él pidió, mil setecientos siclos de oro; sin las planchas, y joyeles, y vestidos de púrpura, que traían los reyes de Madián, y sin los collares que traían sus camellos al cuello.
La Biblia de las Américas (Español) BLA
Jueces 8:26
El peso de los zarcillos de oro que él pidió fue de mil setecientos siclos de oro, sin contar los adornos de media luna, los pendientes y los vestidos de púrpura que llevaban los reyes de Madián y sin contar los collares que llevaban sus camellos al cuello.
English Standard Version ESV
Judges 8:26
And the weight of the golden earrings that he requested was 1,700 shekelsa of gold, besides 1the crescent ornaments and 2the pendants and the purple garments worn by the kings of Midian, and besides the collars that were around the necks of their camels.
La Biblia del Jubileo 2000 JBS
Jueces 8:26
Y fue el peso de los zarcillos de oro que él pidió, mil setecientos siclos de oro; sin las planchas, y joyeles, y vestidos de púrpura, que traían los reyes de Madián, y sin los collares que traían sus camellos al cuello
Judges 8:26
Now the weight of the gold earrings that he requested was one thousand seven hundred shekels of gold, besides the crescent ornaments, pendants, and purple robes which were on the kings of Midian, and besides the chains that were around their camels' necks.
Nueva Traducción Viviente NTV
Jueces 8:26
Todos los aretes de oro pesaron unos diecinueve kilos, sin contar los ornamentos reales ni los pendientes ni la ropa de púrpura usada por los reyes de Madián, ni las cadenas que sus camellos llevaban en el cuello.
Nueva Versión Internacional NVI
Jueces 8:26
El peso de los anillos de oro que él les pidió llegó a diecinueve kilos, sin contar los adornos, los aros y los vestidos de púrpura que usaban los reyes madianitas, ni los collares que llevaban sus camellos.
La Biblia Reina-Valera (Español) RVR
Jueces 8:26
Y fué el peso de los zarcillos de oro que él pidió, mil y setecientos siclos de oro; sin las planchas, y joyeles, y vestidos de púrpura, que traían los reyes de Madián, y sin los collares que traían sus camellos al cuello.