8 y no fueran como sus padres, una generación porfiada y rebelde, generación que no preparó su corazón, y cuyo espíritu no fue fiel a Dios.
9 Los hijos de Efraín eran arqueros bien equipados, pero volvieron las espaldas el día de la batalla.
10 No guardaron el pacto de Dios, y rehusaron andar en su ley;
11 olvidaron sus obras, y los milagros que les había mostrado.
12 El hizo maravillas en presencia de sus padres, en la tierra de Egipto, en el campo de Zoán.
13 Dividió el mar y los hizo pasar, y contuvo las aguas como en un montón.
14 Después los guió de día con la nube, y toda la noche con un resplandor de fuego.
15 Partió las rocas en el desierto, y les dio agua tan abundante como las profundidades del océano;
16 hizo salir corrientes de la peña, e hizo descender aguas como ríos.
17 Pero aún siguieron pecando contra El, rebelándose contra el Altísimo en el desierto.
18 Y en sus corazones tentaron a Dios, pidiendo comida a su gusto.
19 Hablaron contra Dios, y dijeron: ¿Podrá Dios preparar mesa en el desierto?
20 He aquí, hirió la roca y brotaron aguas, y torrentes se desbordaron; ¿podrá también dar pan?, ¿proveerá carne para su pueblo?
21 Por tanto, al oírlo, el SEÑOR se indignó; un fuego se encendió contra Jacob, y aumentó también la ira contra Israel,
22 porque no creyeron en Dios, ni confiaron en su salvación.
23 Sin embargo, dio órdenes a las nubes arriba, y abrió las puertas de los cielos;
24 hizo llover sobre ellos maná para comer, y les dio comida del cielo.
25 Pan de ángeles comió el hombre; Dios les mandó comida hasta saciarlos.
26 Hizo soplar en el cielo el viento solano, y con su poder dirigió el viento del sur,
27 El hizo llover sobre ellos carne como polvo, aladas aves como la arena de los mares,
28 y las hizo caer en medio del campamento, alrededor de sus viviendas.
29 Comieron y quedaron bien saciados, y les concedió su deseo.
30 Antes de que hubieran satisfecho su deseo, mientras la comida aún estaba en su boca,
31 la ira de Dios se alzó contra ellos y mató a algunos de los más robustos, y subyugó a los escogidos de Israel.
32 A pesar de todo esto, todavía pecaron y no creyeron en sus maravillas.
33 El, pues, hizo terminar sus días en vanidad, y sus años en terror súbito.
34 Cuando los hería de muerte, entonces le buscaban, y se volvían y buscaban con diligencia a Dios;
35 se acordaban de que Dios era su roca, y el Dios Altísimo su Redentor.
36 Mas con su boca le engañaban, y con su lengua le mentían.
37 Pues su corazón no era leal para con El, ni eran fieles a su pacto.
38 Mas El, siendo compasivo, perdonaba sus iniquidades y no los destruía; muchas veces contuvo su ira, y no despertó todo su furor.
39 Se acordaba de que ellos eran carne, un soplo que pasa y no vuelve.
40 ¡Cuántas veces se rebelaron contra El en el desierto, y le entristecieron en las soledades!
41 Tentarona Dios una y otra vez, y afligieron al Santo de Israel.
42 No se acordaron de su poder, del día en que los redimió del adversario,
43 cuando hizo sus señales en Egipto, y sus prodigios en el campo de Zoán.
44 Convirtió en sangre sus ríos y sus corrientes, y no pudieron beber.
45 Envió entre ellos enjambres de moscas que los devoraban, y ranas que los destruían.
46 Entregó también sus cosechas al saltamontes, y el fruto de su trabajo a la langosta.
47 Con granizo destruyó sus vides, y sus sicómoros con escarcha.
48 Entregó también al granizo sus ganados, y sus rebaños a los rayos.
49 Envió sobre ellos el ardor de su ira, furia, indignación y angustia, un ejército de ángeles destructores.
50 Preparó senda para su ira; no eximió sus almas de la muerte, sino que entregó sus vidas a la plaga,
51 e hirió a todos los primogénitos en Egipto, las primicias de su virilidad en las tiendas de Cam.
52 Mas a su pueblo lo sacó como a ovejas, como a rebaño los condujo en el desierto;
53 los guió con seguridad, de modo que no temieron, pero el mar se tragó a sus enemigos.
54 Los trajo, pues, a su tierra santa, a esta tierra montañosa que su diestra había adquirido.
55 Y expulsó a las naciones de delante de ellos; las repartió con medida por herencia, e hizo habitar en sus tiendas a las tribus de Israel.
56 Empero ellos tentaron y provocaron al Dios Altísimo, y no guardaron sus testimonios,
57 sino que se volvieron atrás y fueron desleales como sus padres; se desviaron como arco engañoso.
58 Pues le provocaron con sus lugares altos, y despertaron sus celos con sus imágenes talladas.

English Standard Version ESV

Psalm 78:8 and that they should not be 1like their fathers, 2a stubborn and rebellious generation, a generation 3whose heart was not steadfast, whose spirit was not faithful to God.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Salmos 78:8 Y no ser como sus padres, generación contumaz y rebelde; generación que no compuso su corazón, ni su espíritu fue fiel con Dios

King James Version KJV

Psalm 78:8 And might not be as their fathers, a stubborn and rebellious generation; a generation that set not their heart aright, and whose spirit was not stedfast with God.

New King James Version NKJV

Psalm 78:8 And may not be like their fathers, A stubborn and rebellious generation, A generation that did not set its heart aright, And whose spirit was not faithful to God.

Nueva Traducción Viviente NTV

Salmos 78:8 Entonces no serán obstinados, rebeldes e infieles
como sus antepasados,
quienes se negaron a entregar su corazón a Dios.

Nueva Versión Internacional NVI

Salmos 78:8 Así no serían como sus antepasados:generación obstinada y rebelde,gente de corazón fluctuante,cuyo espíritu no se mantuvo fiel a Dios.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Salmos 78:8 Y no sean como sus padres, Generación contumaz y rebelde; Generación que no apercibió su corazón, Ni fué fiel para con Dios su espíritu.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Salmos 78:8 Y no ser como sus padres, generación contumaz y rebelde; generación que no compuso su corazón, ni su espíritu fue fiel con Dios.

Herramientas de Estudio para Salmos 78:8-58