1
Salmo 40
Para el director del coro: salmo de David.
Con paciencia esperé que el Señor
me ayudara,
y él se fijó en mí y oyó mi clamor.
2
Me sacó del foso de desesperación,
del lodo y del fango.
Puso mis pies sobre suelo firme
y a medida que yo caminaba, me estabilizó.
3
Me dio un canto nuevo para entonar,
un himno de alabanza a nuestro Dios.
Muchos verán lo que él hizo y quedarán asombrados;
pondrán su confianza en el Señor
.
4
Ah, qué alegría para los que confían en el Señor
,
los que no confían en los orgullosos
ni en aquellos que rinden culto a ídolos.
5
Oh Señor
mi Dios, has realizado muchas maravillas a nuestro favor.
Son tantos tus planes para nosotros que resulta imposible enumerarlos.
No hay nadie como tú.
Si tratara de mencionar todas tus obras maravillosas,
no terminaría jamás.
6
No te deleitas en las ofrendas ni en los sacrificios.
Ahora que me hiciste escuchar, finalmente comprendo:
tú no exiges ofrendas quemadas ni ofrendas por el pecado.
7
Entonces dije: «Aquí estoy.
Como está escrito acerca de mí en las Escrituras:
8
me complace hacer tu voluntad, Dios mío,
pues tus enseñanzas están escritas en mi corazón».