1
¡Oh SEÑOR, cómo se han multiplicado mis adversarios! Muchos se levantan contra mí.
2
Muchos dicen de mi alma: Para él no hay salvación en Dios. (Selah )
3
Mas tú, SEÑOR, eres escudo en derredor mío, mi gloria, y el que levanta mi cabeza.
4
Con mi voz clamé al SEÑOR, y El me respondió desde su santo monte. (Selah)
5
Yo me acosté y me dormí; desperté, pues el SEÑOR me sostiene.
6
No temeré a los diez millares de enemigos que se han puesto en derredor contra mí.