1
Yo te amo, SEÑOR, fortaleza mía.
2
El SEÑOR es mi roca, mi baluarte y mi libertador; mi Dios, mi roca en quien me refugio; mi escudo y el cuerno de mi salvación, mi altura inexpugnable.
3
Invoco al SEÑOR, que es digno de ser alabado, y soy salvo de mis enemigos.
4
Los lazos de la muerte me cercaron, y los torrentes de iniquidad me atemorizaron;
5
los lazos del Seol me rodearon; las redes de la muerte surgieron ante mí.
6
En mi angustia invoqué al SEÑOR, y clamé a mi Dios; desde su templo oyó mi voz, y mi clamor delante de El llegó a sus oídos.