1
¡Cuán bienaventurados son los de camino perfecto, los que andan en la ley del SEÑOR!
2
¡Cuán bienaventurados son los que guardan sus testimonios, y con todo el corazón le buscan!
3
No cometen iniquidad, sino que andan en sus caminos.
4
Tú has ordenado tus preceptos, para que los guardemos con diligencia.
5
¡Ojalá mis caminos sean afirmados para guardar tus estatutos!
6
Entonces no seré avergonzado, al considerar todos tus mandamientos.