10
¿Qué puedo decir de las casas de los perversos
que se llenaron de riquezas obtenidas con estafa?
¿Qué de la práctica repugnante
de pesar el grano con medidas falsas?
11
¿Cómo podré tolerar a tus mercaderes
que usan balanzas y pesas adulteradas?
12
Los ricos entre ustedes llegaron a tener mucho dinero
mediante la extorsión y la violencia.
Tus habitantes están tan acostumbrados a mentir,
que su lengua ya no puede decir la verdad.
13
»¡Por lo tanto, yo te heriré!
Te dejaré en la ruina a causa de todos tus pecados.
14
Comerás pero no quedarás satisfecho.
Las punzadas de hambre y el vacío de tu estómago no cesarán.
Aunque intentes ahorrar dinero,
al final no te quedará nada.
Guardarás un poco,
pero se lo daré a tus conquistadores.
15
Sembrarás
pero no cosecharás.
Prensarás tus aceitunas
pero no obtendrás aceite suficiente para ungirte.
Pisarás las uvas
pero no conseguirás sacarles jugo para hacer vino.
16
¡Tú respetas solo las leyes del malvado rey Omri;
sigues solo el ejemplo del perverso rey Acab!
Por lo tanto, haré de ti un ejemplo,
llevándote a la ruina.
Serás tratado con desprecio,
ridiculizado por todos los que te vean».