10
Cuando Jesús salió del agua, vio que el cielo se abría y el Espíritu Santo descendía sobre él
como una paloma.
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Y una voz dijo desde el cielo: «Tú eres mi Hijo muy amado y me das gran gozo».
12
Luego el Espíritu lo impulsó a ir al desierto,
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donde Jesús fue tentado por Satanás durante cuarenta días. Estaba a la intemperie entre los animales salvajes, y los ángeles lo cuidaban.
14
Más tarde, después del arresto de Juan, Jesús entró en Galilea, donde predicó la Buena Noticia de Dios.
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—anunciaba—.
16
Primeros discípulos
Cierto día, mientras Jesús caminaba por la orilla del mar de Galilea, vio a Simón
y a su hermano Andrés que echaban la red al agua, porque vivían de la pesca.
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Jesús los llamó:
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Y enseguida dejaron las redes y lo siguieron.
19
Un poco más adelante por la orilla, Jesús vio a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, en una barca, reparando las redes.
20
Los llamó de inmediato y ellos también lo siguieron, dejando a su padre Zebedeo en la barca con los hombres contratados.