2 Entonces el patrón lo llamó y le dijo: “¿Qué es esto que oigo acerca de ti? Prepara un informe final porque voy a despedirte”.
3 »El administrador pensó: “¿Y ahora qué haré? Mi jefe me ha despedido. No tengo fuerzas para cavar zanjas y soy demasiado orgulloso para mendigar.
4 Ah, ya sé cómo asegurarme de que tendré muchos amigos que me recibirán en sus casas cuando mi patrón me despida”.
5 »Entonces invitó a todo el que le debía dinero a su patrón para conversar sobre la situación. Le preguntó al primero: “¿Cuánto debes a mi patrón?”.
6 El hombre contestó: “Le debo tres mil litros de aceite de oliva”. Entonces el administrador le dijo: “Toma la factura y cámbiala a mil quinientos litros”.
7 »Le preguntó al siguiente: “¿Cuánto le debes tú?”. “Le debo mil medidas de trigo”, respondió. “Toma la factura y cámbiala a ochocientas medidas”, le dijo.
8 »El hombre rico tuvo que admirar a este pícaro deshonesto por su astucia. Y la verdad es que los hijos de este mundo son más astutos que los hijos de la luz al lidiar con el mundo que los rodea.
9 Aquí está la lección: usen sus recursos mundanos para beneficiar a otros y para hacer amigos. Entonces, cuando esas posesiones terrenales se acaben, ellos les darán la bienvenida a un hogar eterno.
10 »Si son fieles en las cosas pequeñas, serán fieles en las grandes; pero si son deshonestos en las cosas pequeñas, no actuarán con honradez en las responsabilidades más grandes.
11 Entonces, si no son confiables con las riquezas mundanas, ¿quién les confiará las verdaderas riquezas del cielo?;
12 y si no son fieles con las cosas de otras personas, ¿por qué se les debería confiar lo que es de ustedes?
13 »Nadie puede servir a dos amos. Pues odiará a uno y amará al otro; será leal a uno y despreciará al otro. No se puede servir a Dios y al dinero».
14 Los fariseos, que amaban mucho su dinero, oyeron todo eso y se burlaron de Jesús.
15 Entonces él les dijo:
16 »Hasta el tiempo de Juan el Bautista, la ley de Moisés y el mensaje de los profetas fueron sus guías; pero ahora se predica la Buena Noticia del reino de Dios, y todos están ansiosos por entrar.
17 Eso no significa que la ley haya perdido su fuerza. Es más fácil que el cielo y la tierra desaparezcan, a que el más pequeño punto de la ley de Dios sea anulado.
18 »Por ejemplo, un hombre que se divorcia de su esposa y se casa con otra comete adulterio; y el que se case con una mujer divorciada de su esposo comete adulterio».
19 Parábola del rico y Lázaro
Jesús dijo:
20 Tirado a la puerta de su casa había un hombre pobre llamado Lázaro, quien estaba cubierto de llagas.
21 Mientras Lázaro estaba tendido, deseando comer las sobras de la mesa del hombre rico, los perros venían y le lamían las llagas abiertas.
22 »Con el tiempo, el hombre pobre murió, y los ángeles lo llevaron a estar con Abraham.
El hombre rico también murió y fue enterrado,
23 y su alma fue al lugar de los muertos.
Allí, en medio del tormento, vio a Abraham a lo lejos con Lázaro junto a él.
24 »El hombre rico gritó: “¡Padre Abraham, ten piedad! Envíame a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua y refresque mi lengua. Estoy en angustia en estas llamas”.
25 »Abraham le dijo: “Hijo, recuerda que tuviste todo lo que quisiste durante tu vida, y Lázaro no tuvo nada. Ahora él está aquí recibiendo consuelo y tú estás en angustia.
26 Además, hay un gran abismo que nos separa. Ninguno de nosotros puede cruzar hasta allí, y ninguno de ustedes puede cruzar hasta aquí”.
27 »Entonces el hombre rico dijo: “Por favor, padre Abraham, al menos envíalo a la casa de mi padre.
28 Tengo cinco hermanos y quiero advertirles que no terminen en este lugar de tormento”.
29 »Abraham le dijo: “Moisés y los profetas ya les advirtieron. Tus hermanos pueden leer lo que ellos escribieron”.
30 »El hombre rico respondió: “¡No, padre Abraham! Pero si se les envía a alguien de los muertos ellos se arrepentirán de sus pecados y volverán a Dios”.
31 »Pero Abraham le dijo: “Si no escuchan a Moisés y a los profetas, no escucharán por más que alguno se levantara de los muertos”».

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Lucas 16:2 Entonces lo llamó y le dijo: "¿Qué es esto que oigo acerca de ti? Rinde cuentas de tu administración, porque no puedes ser más mayordomo."

English Standard Version ESV

Luke 16:2 And he called him and said to him, 'What is this that I hear about you? Turn in the account of your management, for you can no longer be manager.'

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Lucas 16:2 Y le llamó, y le dijo: ¿Qué es esto que oigo de ti? Da cuenta de tu mayordomía, porque ya no podrás más ser mayordomo

King James Version KJV

Luke 16:2 And he called him, and said unto him, How is it that I hear this of thee? give an account of thy stewardship; for thou mayest be no longer steward.

New King James Version NKJV

Luke 16:2 So he called him and said to him, 'What is this I hear about you? Give an account of your stewardship, for you can no longer be steward.'

Nueva Versión Internacional NVI

Lucas 16:2 Así que lo mandó a llamar y le dijo: “¿Qué es esto que me dicen de ti? Rinde cuentas de tu administración, porque ya no puedes seguir en tu puesto”.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Lucas 16:2 Y le llamó, y le dijo: ¿Qué es esto que oigo de ti? Da cuenta de tu mayordomía, porque ya no podrás más ser mayordomo.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Lucas 16:2 Y le llamó, y le dijo: ¿Qué es esto que oigo de ti? Da cuenta de tu mayordomía, porque ya no podrás más ser mayordomo.

Herramientas de Estudio para Lucas 16:2-31