4 Tensa el arco contra su pueblo
como si él fuera su enemigo.
Utiliza su fuerza contra ellos
para matar a sus mejores jóvenes.
Su furia se derrama como fuego
sobre la bella Jerusalén.
5 Así es, el Señor venció a Israel
como lo hace un enemigo.
Destruyó sus palacios
y demolió sus fortalezas.
Causó dolor y llanto interminable
sobre la bella Jerusalén.
6 Derribó su templo
como si fuera apenas una choza en el jardín.
El Señor
ha borrado todo recuerdo
de los festivales sagrados y los días de descanso.
Ante su ira feroz
reyes y sacerdotes caen juntos.
7 El Señor rechazó su propio altar;
desprecia su propio santuario.
Entregó los palacios de Jerusalén
a sus enemigos.
Ellos gritan en el templo del Señor
como si fuera un día de celebración.
8 El Señor
decidió
destruir las murallas de la bella Jerusalén.
Hizo cuidadosos planes para su destrucción,
después los llevó a cabo.
Por eso, los terraplenes y las murallas
cayeron ante él.
9 Las puertas de Jerusalén se han hundido en la tierra;
él rompió sus cerrojos y sus barrotes.
Sus reyes y príncipes fueron desterrados a tierras lejanas;
su ley dejó de existir.
Sus profetas no reciben
más visiones de parte del Señor
.
10 Los líderes de la bella Jerusalén
se sientan en el suelo en silencio;
están vestidos de tela áspera
y se echan polvo sobre la cabeza.
Las jóvenes de Jerusalén
bajan la cabeza avergonzadas.
11 Lloré hasta que no tuve más lágrimas;
mi corazón está destrozado.
Mi espíritu se derrama de angustia
al ver la situación desesperada de mi pueblo.
Los niños y los bebés
desfallecen y mueren en las calles.
12 Claman a sus madres:
«¡Necesitamos comida y bebida!».
Sus vidas se extinguen en las calles
como la de un guerrero herido en la batalla;
intentan respirar para mantenerse vivos
mientras desfallecen en los brazos de sus madres.
13 ¿Qué puedo decir de ti?
¿Quién ha visto alguna vez semejante dolor?
Oh hija de Jerusalén,
¿con qué puedo comparar tu angustia?
Oh virgen hija de Sión,
¿cómo puedo consolarte?
Pues tu herida es tan profunda como el mar.
¿Quién puede sanarte?
14 Tus profetas han declarado
tantas tonterías; son falsas hasta la médula.
No te salvaron del destierro
exponiendo a la luz tus pecados.
Más bien, te pintaron cuadros engañosos
y te llenaron de falsas esperanzas.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Lamentaciones 2:4 Ha entesado su arco como enemigo, ha afirmado su diestra como adversario y ha matado todo lo que era agradable a la vista; en la tienda de la hija de Sion ha derramado su furor como fuego.

English Standard Version ESV

Lamentations 2:4 He has bent his bow like an enemy, with his right hand set like a foe; and he has killed all who were delightful in our eyes in the tent of the daughter of Zion; he has poured out his fury like fire.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Lamentaciones 2:4 Dálet: Entesó su arco como enemigo, afirmó su mano derecha como adversario, y mató toda cosa hermosa a la vista en la tienda de la hija de Sion; derramó como fuego su enojo

King James Version KJV

Lamentations 2:4 He hath bent his bow like an enemy: he stood with his right hand as an adversary, and slew all that were pleasant to the eye in the tabernacle of the daughter of Zion: he poured out his fury like fire.

New King James Version NKJV

Lamentations 2:4 Standing like an enemy, He has bent His bow; With His right hand, like an adversary, He has slain all who were pleasing to His eye; On the tent of the daughter of Zion, He has poured out His fury like fire.

Nueva Versión Internacional NVI

Lamentaciones 2:4 Como enemigo, tensó el arco;lista estaba su mano derecha.Como enemigo, eliminóa nuestros seres queridos.Como fuego, derramó su irasobre las tiendas de la bella Sión.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Lamentaciones 2:4 Entesó su arco como enemigo, afirmó su mano derecha como adversario, Y mató toda cosa hermosa á la vista: En la tienda de la hija de Sión derramó como fuego su enojo.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Lamentaciones 2:4 Dálet : Entesó su arco como enemigo, afirmó su mano derecha como adversario, y mató toda cosa hermosa a la vista en la tienda de la hija de Sion; derramó como fuego su enojo.

Herramientas de Estudio para Lamentaciones 2:4-14