31
El que de arriba viene, sobre todos es: el que es de la tierra, terreno es, y cosas terrenas habla; el que viene del cielo, sobre todos es.
32
Y lo que vio y oyó, esto testifica; y nadie recibe su testimonio.
33
El que recibe su testimonio, éste ha puesto su sello que Dios es Verdadero.
34
Porque el que Dios envió, las palabras de Dios habla; porque no le da Dios el Espíritu por medida.
35
El Padre ama al Hijo, y todas las cosas dio en su mano.
36
El que cree en el Hijo, tiene vida eterna; mas el que al Hijo es incrédulo, no verá la vida, sino que la ira de Dios permanece sobre él.