1
»Les he dicho estas cosas para que no abandonen su fe.
2
Los expulsarán de las sinagogas, y llegará el tiempo en que quienes los maten pensarán que están haciendo un servicio santo para Dios.
3
Eso se debe a que nunca han conocido ni al Padre ni a mí.
4
Les digo estas cosas ahora para que, cuando sucedan, recuerden mi advertencia. No las mencioné antes porque todavía iba a estar un tiempo más con ustedes.
5
La obra del Espíritu Santo
6
En cambio, se entristecen por lo que les he dicho.
7
En realidad, es mejor para ustedes que me vaya porque, si no me fuera, el Abogado Defensor
no vendría. En cambio, si me voy, entonces se lo enviaré a ustedes;
8
y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado y de la justicia de Dios y del juicio que viene.
9
El pecado del mundo consiste en que el mundo se niega a creer en mí.