25
El SEÑOR ha abierto su arsenal y ha sacado las armas de su indignación, porque esta es obra del Señor, DIOS de los ejércitos, en la tierra de los caldeos.
26
Venid contra ella desde los últimos confines; abrid sus graneros, convertidla en montones y destruidla por completo; que no le quede nada.
27
Pasad a espada todos sus novillos; que desciendan al matadero. ¡Ay de ellos, porque ha llegado su día, la hora de su castigo!
28
Se oye la voz de los fugitivos y evadidos de la tierra de Babilonia anunciando en Sion la venganza del SEÑOR nuestro Dios, la venganza de su templo.
29
Reclutad arqueros contra Babilonia, a todos los que entesan el arco; acampad contra ella por todos lados, que no haya escape. Dadle el pago conforme a su obra; conforme a todo lo que ha hecho, así haced con ella; porque se ha vuelto insolente contra el SEÑOR, contra el Santo de Israel.
30
Por tanto sus jóvenes caerán en sus calles, y todos sus hombres de guerra serán silenciados en aquel díadeclara el SEÑOR.
31
He aquí, estoy contra ti, arrogante, declara el Señor, DIOS de los ejércitos porque ha llegado tu día, la hora en que te castigaré.
32
Y la arrogante tropezará y caerá sin que nadie la levante; y prenderé fuego a sus ciudades, el cual devorará todos sus alrededores.
33
Así dice el SEÑOR de los ejércitos: Oprimidos están los hijos de Israel y los hijos de Judá a una; todos los que los tomaron cautivos los han retenido, se han negado a soltarlos.
34
Pero su Redentor es fuerte, el SEÑOR de los ejércitos es su nombre; defenderá su causa con energía para traer reposo a la tierra y turbación a los habitantes de Babilonia.
35
Espada contra los caldeosdeclara el SEÑOR y contra los habitantes de Babilonia, contra sus oficiales y sus sabios.