9 Pues mi pueblo servirá al Señor
su Dios
y a su rey, descendiente de David,
el rey que yo le levantaré.
10 »Así que no temas, Jacob, mi siervo;
no te dejes abatir, Israel
—dice el Señor
—.
Pues desde tierras lejanas los traeré de regreso a casa,
y sus hijos regresarán del destierro.
Israel regresará a una vida de paz y tranquilidad,
y nadie lo atemorizará.
11 Yo estoy contigo y te salvaré
—dice el Señor
—.
Destruiré por completo a las naciones entre las cuales te esparcí,
pero a ti no te destruiré por completo.
Te disciplinaré, pero con justicia;
no puedo dejarte sin castigo».
12 Esto dice el Señor
:
«Tu lesión es incurable,
una herida terrible.
13 No hay nadie que te ayude
ni que vende tu herida.
Ningún medicamento puede curarte.
14 Todos tus amantes, tus aliados, te han abandonado
y ya no se interesan por ti.
Te he herido cruelmente
como si fuera tu enemigo.
Pues tus pecados son muchos
y tu culpa es grande.
15 ¿Por qué te quejas de tu castigo,
de esta herida que no tiene cura?
He tenido que castigarte
porque tus pecados son muchos
y tu culpa es grande.
16 »Pero todos los que te devoran serán devorados,
y todos tus enemigos serán enviados al destierro.
Todos los que te saquean serán saqueados,
y todos los que te atacan serán atacados.
17 Te devolveré la salud
y sanaré tus heridas —dice el Señor
—,
aunque te llamen desechada, es decir,
“Jerusalén,
de quien nadie se interesa”».
18 Esto dice el Señor
:
«Cuando del cautiverio traiga a Israel de regreso a casa
y cuando restablezca su bienestar,
Jerusalén será reedificada sobre sus ruinas
y el palacio reconstruido como antes.
19 Habrá alegría y canciones de acción de gracias,
y multiplicaré a mi pueblo, no lo reduciré;
lo honraré, no lo despreciaré.
20 Sus hijos prosperarán como en el pasado.
Los estableceré como una nación delante de mí,
y castigaré a cualquiera que les haga daño.
21 Volverán a tener su propio gobernante,
quien surgirá de entre ellos mismos.
Lo invitaré a que se acerque a mí —dice el Señor
—,
porque ¿quién se atrevería a acercarse sin ser invitado?
22 Ustedes serán mi pueblo
y yo seré su Dios».
23 ¡Miren! El enojo del Señor
estalla como una tormenta,
un viento devastador que se arremolina sobre las cabezas de los perversos.
24 La ira feroz del Señor
no disminuirá
hasta que haya terminado con todo lo que él tiene pensado.
En los días futuros
ustedes entenderán todo esto.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Jeremías 30:9 sino que servirán al SEÑOR su Dios, y a David su rey, a quien yo levantaré para ellos.

English Standard Version ESV

Jeremiah 30:9 But they shall serve the LORD their God and David their king, whom I will raise up for them.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Jeremías 30:9 sino que servirán al SEÑOR su Dios, y a David su rey, el cual les levantaré

King James Version KJV

Jeremiah 30:9 But they shall serve the LORD their God, and David their king, whom I will raise up unto them.

New King James Version NKJV

Jeremiah 30:9 But they shall serve the Lord their God, And David their king, Whom I will raise up for them.

Nueva Versión Internacional NVI

Jeremías 30:9 Servirán al SEÑOR, su Dios,y a David, a quien pondré como su rey.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Jeremías 30:9 Sino que servirán á Jehová su Dios, y á David su rey, el cual les levantaré.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Jeremías 30:9 sino que servirán al SEÑOR su Dios, y a David su rey, el cual les levantaré.

Herramientas de Estudio para Jeremías 30:9-24