4
«Esto dice el Señor
de los Ejércitos Celestiales, Dios de Israel, a los cautivos que él desterró de Jerusalén a Babilonia:
5
“Edifiquen casas y hagan planes para quedarse. Planten huertos y coman del fruto que produzcan.
6
Cásense y tengan hijos. Luego encuentren esposos y esposas para ellos para que tengan muchos nietos. ¡Multiplíquense! ¡No disminuyan!
7
Y trabajen por la paz y prosperidad de la ciudad donde los envié al destierro. Pidan al Señor
por la ciudad, porque del bienestar de la ciudad dependerá el bienestar de ustedes”.
8
»Esto dice el Señor
de los Ejércitos Celestiales, Dios de Israel: “No permitan que los engañen los profetas y los adivinos que están entre ustedes en la tierra de Babilonia. No presten atención a sus sueños,
9
porque les dicen mentiras en mi nombre. Yo no los envié”, dice el Señor
.
10
»Esto dice el Señor
: “Ustedes permanecerán en Babilonia durante setenta años; pero luego vendré y cumpliré todas las cosas buenas que les prometí, y los llevaré de regreso a casa.
11
Pues yo sé los planes que tengo para ustedes —dice el Señor
—. Son planes para lo bueno y no para lo malo, para darles un futuro y una esperanza.
12
En esos días, cuando oren, los escucharé.
13
Si me buscan de todo corazón, podrán encontrarme.
14
Sí, me encontrarán —dice el Señor
—. Pondré fin a su cautiverio y restableceré su bienestar. Los reuniré de las naciones adonde los envié y los llevaré a casa, de regreso a su propia tierra”.