16
Ante sus propios ojos, estrellarán a sus niños pequeños hasta matarlos.
Sus hogares serán saqueados, y sus mujeres violadas.
17
«Miren, yo incitaré a los medos contra Babilonia.
No se les puede tentar con plata
ni sobornar con oro.
18
Los ejércitos agresores traspasarán a los jóvenes con sus flechas.
No tendrán misericordia de los indefensos bebés
ni compasión de los niños».
19
Babilonia, el más glorioso de los reinos,
la flor del orgullo caldeo,
será devastada como Sodoma y Gomorra
cuando Dios las destruyó.
20
Babilonia nunca más volverá a ser habitada;
permanecerá vacía de generación en generación.
Los nómadas se negarán a acampar allí,
y los pastores no llevarán a sus ovejas para que pasen la noche.
21
Las bestias del desierto se instalarán en la ciudad en ruinas
y en las casas rondarán criaturas aullantes.
Los búhos vivirán en medio de las ruinas
y las cabras salvajes irán allí para danzar.
22
Las hienas aullarán en las fortalezas
y los chacales harán su guarida en los lujosos palacios.
Los días de Babilonia están contados;
pronto llegará el momento de su destrucción.