11 Y le estaban atentos, porque con sus artes mágicas los había asombrado mucho tiempo.
12 Pero cuando creyeron a Felipe, que les anunciaba el Evangelio del Reino de Dios y el Nombre de Jesús el Cristo, se bautizaban hombres y mujeres.
13 El mismo Simón creyó también entonces, y bautizándose, se llegó a Felipe; y viendo los milagros y grandes maravillas que se hacían, estaba atónito.
14 Y los apóstoles que estaban en Jerusalén, habiendo oído que Samaria había recibido la palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan;
15 los cuales venidos, oraron por ellos, para que recibiesen el Espíritu Santo;
16 (porque aún no había descendido en ninguno de ellos, mas solamente eran bautizados en el Nombre de Jesus.)
17 Entonces les impusieron las manos, y recibieron el Espíritu Santo.
18 Cuando vio Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles se daba el Espíritu Santo, les ofreció dinero,
19 diciendo: Dadme también a mí esta potestad, que a cualquiera que pusiere las manos encima, reciba el Espíritu Santo.
20 Entonces Pedro le dijo: Tu dinero perezca contigo, qué piensas que el don de Dios se gana por dinero.
21 No tienes tú parte ni suerte en este negocio; porque tu corazón no es recto delante de Dios.
22 Arrepiéntete pues de ésta tu maldad, y ruega a Dios, si quizás te será perdonado este pensamiento de tu corazón.
23 Porque en hiel de amargura y en prisión de maldad veo que estás.
24 Respondiendo entonces Simón, dijo: Rogad vosotros por mí al Señor, que ninguna cosa de éstas que habéis dicho, venga sobre mí.
25 Y ellos, habiendo testificado y hablado la Palabra de Dios, se volvieron a Jerusalén, y en muchas tierras de los samaritanos anunciaron el Evangelio.
26 Y el ángel del Señor habló a Felipe, diciendo: Levántate y ve hacia el mediodía, al camino que desciende de Jerusalén a Gaza, el cual es desierto.
27 Entonces él se levantó, y fue; y he aquí un Etíope, eunuco, gobernador de Candace, reina de los Etíopes, el cual era puesto sobre todos sus tesoros, y había venido a adorar a Jerusalén,
28 y se volvía sentado en su carro, y leyendo al profeta Isaías.
29 Y el Espíritu dijo a Felipe: Llégate, y júntate a este carro.
30 Y acudiendo Felipe, le oyó que leía al profeta Isaías, y dijo: Pero ¿entiendes lo que lees?
31 Y dijo: ¿Y cómo podré, si alguno no me enseñare? Y rogó a Felipe que subiese, y se sentase con él.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Hechos 8:11 Le prestaban atención porque por mucho tiempo los había asombrado con sus artes mágicas.

English Standard Version ESV

Acts 8:11 And they paid attention to him because for a long time he had amazed them with his magic.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Hechos 8:11 Y le estaban atentos, porque con sus artes mágicas los había asombrado mucho tiempo

King James Version KJV

Acts 8:11 And to him they had regard, because that of long time he had bewitched them with sorceries.

New King James Version NKJV

Acts 8:11 And they heeded him because he had astonished them with his sorceries for a long time.

Nueva Traducción Viviente NTV

Hechos 8:11 Lo escuchaban con atención porque, por mucho tiempo, él los había maravillado con su magia.

Nueva Versión Internacional NVI

Hechos 8:11 Lo seguían porque por mucho tiempo los había tenido deslumbrados con sus artes mágicas.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Hechos 8:11 Y le estaban atentos, porque con sus artes mágicas los había embelesado mucho tiempo.

Herramientas de Estudio para Hechos 8:11-31