1 Reglas antiguas sobre la adoración
Ese primer pacto entre Dios e Israel incluía ordenanzas para la adoración y un lugar de culto aquí, en la tierra.
2 Ese tabernáculo
estaba formado por dos salas. En la primera sala había un candelabro, una mesa y los panes consagrados sobre ella. Esta sala se llamaba Lugar Santo.
3 Luego había una cortina detrás de la cual se encontraba la segunda sala,
llamada Lugar Santísimo.
4 En esa sala había un altar de oro para el incienso y un cofre de madera conocido como el arca del pacto, el cual estaba totalmente cubierto de oro. Dentro del arca había un recipiente de oro que contenía el maná, la vara de Aarón a la que le habían salido hojas y las tablas del pacto que eran de piedra.
5 Por encima del arca estaban los querubines de la gloria divina, cuyas alas se extendían sobre la tapa del arca, es decir, el lugar de la expiación; pero ahora no podemos explicar estas cosas en detalle.
6 Cuando estos elementos estaban en su lugar, los sacerdotes entraban con regularidad en la primera sala,
durante el cumplimiento de sus deberes religiosos.
7 Pero sólo el sumo sacerdote entraba en el Lugar Santísimo y lo hacía una sola vez al año; y siempre ofrecía sangre por sus propios pecados y por los pecados que el pueblo cometía por ignorancia.
8 Mediante esas ordenanzas, el Espíritu Santo daba a entender que la entrada al Lugar Santísimo no estaba abierta a todos en tanto siguiera en pie el tabernáculo
y el sistema que representaba.
9 Esta es una ilustración que apunta al tiempo presente. Pues las ofrendas y los sacrificios que ofrecen los sacerdotes no pueden limpiar la conciencia de las personas que los traen.
10 Pues ese sistema antiguo solo consiste en alimentos, bebidas y diversas ceremonias de purificación, es decir, ordenanzas externas
que permanecieron vigentes solo hasta que se estableció un sistema mejor.
11 Cristo es el sacrificio perfecto
Entonces Cristo ahora ha llegado a ser el Sumo Sacerdote por sobre todas las cosas buenas que han venido.
Él entró en ese tabernáculo superior y más perfecto que está en el cielo, el cual no fue hecho por manos humanas ni forma parte del mundo creado.
12 Con su propia sangre —no con la sangre de cabras ni de becerros— entró en el Lugar Santísimo una sola vez y para siempre, y aseguró nuestra redención eterna.
13 Bajo el sistema antiguo, la sangre de cabras y toros y las cenizas de una novilla podían limpiar el cuerpo de las personas que estaban ceremonialmente impuras.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Hebreos 9:1 Ahora bien, aun el primer pacto tenía ordenanzas de culto y el santuario terrenal.

English Standard Version ESV

Hebrews 9:1 Now even the first covenant had regulations for worship and 1an earthly place of holiness.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Hebreos 9:1 Tenía sin embargo el primero sus justificaciones del culto, y su santuario mundano

King James Version KJV

New King James Version NKJV

Hebrews 9:1 Then indeed, even the first covenant had ordinances of divine service and the earthly sanctuary.

Nueva Versión Internacional NVI

Hebreos 9:1 Ahora bien, el primer pacto tenía sus normas para el culto, y un santuario terrenal.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Hebreos 9:1 TENIA empero también el primer pacto reglamentos del culto, y santuario mundano.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Hebreos 9:1 Tenía sin embargo el primero sus justificaciones del culto, y su santuario mundano.

Herramientas de Estudio para Hebreos 9:1-13