3 Entonces las aguas del diluvio se retiraron de la tierra en forma gradual. Después de ciento cincuenta días,
4 exactamente cinco meses después de que comenzó el diluvio,
la barca se detuvo sobre las montañas de Ararat.
5 Dos meses y medio más tarde,
mientras las aguas seguían bajando, otras cumbres se hicieron visibles.
6 Pasados otros cuarenta días, Noé abrió la ventana que había hecho en la barca
7 y soltó un cuervo. El pájaro voló ida y vuelta hasta que las aguas del diluvio terminaron de secarse sobre la tierra.
8 También soltó una paloma para ver si el agua se había retirado y si la paloma podía encontrar suelo seco;
9 pero la paloma no pudo encontrar ningún lugar donde posarse, porque el agua aún cubría la tierra. Así que volvió a la barca, y Noé extendió su mano y metió la paloma adentro.
10 Después de esperar otros siete días, Noé volvió a soltar la paloma;
11 esta vez la paloma regresó a él por la tarde con una hoja de olivo fresca en su pico. Entonces Noé supo que las aguas del diluvio se habían retirado casi por completo.
12 Esperó otros siete días y volvió a soltar la paloma. Esta vez el ave no regresó.
13 Ahora Noé tenía seiscientos un años de edad. El primer día del nuevo año, diez meses y medio después del comienzo del diluvio,
las aguas del diluvio se habían secado de la tierra casi por completo. Noé levantó la cubierta de la barca y vio que la superficie de la tierra se estaba secando.
14 Pasaron otros dos meses,
¡y por fin la tierra quedó seca!
15 Entonces Dios le dijo a Noé:
16 «Todos ustedes —tú y tu esposa, y tus hijos y sus esposas— salgan de la barca.
17 Suelta a todos los animales —las aves, los animales y los animales pequeños que corren por el suelo— para que puedan ser fructíferos y se multipliquen por toda la tierra».
18 Entonces Noé, su esposa, sus hijos y las esposas de sus hijos salieron de la barca;
19 y todos los animales, grandes y pequeños, y las aves salieron de la barca, pareja por pareja.
20 Luego Noé construyó un altar al Señor
y allí sacrificó como ofrendas quemadas los animales y las aves que habían sido aprobados para ese propósito.
21 Al Señor
le agradó el aroma del sacrificio y se dijo a sí mismo: «Nunca más volveré a maldecir la tierra por causa de los seres humanos, aun cuando todo lo que ellos piensen o imaginen se incline al mal desde su niñez. Nunca más volveré a destruir a todos los seres vivos.
22 Mientras la tierra permanezca, habrá cultivos y cosechas, frío y calor, verano e invierno, día y noche».

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Génesis 8:3 Las aguas bajaron gradualmente de sobre la tierra, y al cabo de ciento cincuenta días, las aguas habían decrecido.

English Standard Version ESV

Genesis 8:3 and the waters receded from the earth continually. At the end of 150 days the waters had abated,

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Génesis 8:3 Y se tornaron las aguas de sobre la tierra, yendo y volviendo; y decrecieron las aguas al cabo de ciento cincuenta días

King James Version KJV

Genesis 8:3 And the waters returned from off the earth continually*:a and after the end of the hundred and fifty days the waters were abated.

New King James Version NKJV

Genesis 8:3 And the waters receded continually from the earth. At the end of the hundred and fifty days the waters decreased.

Nueva Versión Internacional NVI

Génesis 8:3 Poco a poco las aguas se fueron retirando de la tierra. Al cabo de ciento cincuenta días las aguas habían disminuido.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Génesis 8:3 Y tornáronse las aguas de sobre la tierra, yendo y volviendo: y decrecieron las aguas al cabo de ciento y cincuenta días.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Génesis 8:3 Y se tornaron las aguas de sobre la tierra, yendo y volviendo; y decrecieron las aguas al cabo de ciento cincuenta días.

Herramientas de Estudio para Génesis 8:3-22