10
El cetro no se apartará de Judá, ni la vara de gobernante de entre sus pies, hasta que venga Siloh, y a él sea dada la obediencia de los pueblos.
11
El ata a la vid su pollino, y a la mejor cepa el hijo de su asna; él lava en vino sus vestiduras, y en la sangre de las uvas su manto.
12
Sus ojos están apagados por el vino, y sus dientes blancos por la leche.
13
Zabulón habitará a la orilla del mar; y él será puerto para naves, y su límite será hasta Sidón.
14
Isacar es un asno fuerte, echado entre los apriscos.
15
Al ver que el lugar de reposo era bueno y que la tierra era agradable, inclinó su hombro para cargar, y llegó a ser esclavo en trabajos forzados.
16
Dan juzgará a su pueblo, como una de las tribus de Israel.
17
Sea Dan serpiente junto al camino, víbora junto al sendero, que muerde los jarretes del caballo, y cae su jinete hacia atrás.
18
¡Tu salvación espero, oh Señor!
19
A Gad salteadores lo asaltarán, mas él asaltará su retaguardia.
20
En cuanto a Aser, su alimento será sustancioso, y él dará manjares de rey.