33
Pero cuando la comida fue puesta delante de él para que comiera, dijo: No comeré hasta que haya dicho el propósito de mi viaje. Y Labán le dijo: Habla.
34
Entonces dijo: Soy siervo de Abraham.
35
Y el SEÑOR ha bendecido en gran manera a mi señor, que se ha enriquecido, y le ha dado ovejas y vacas, plata y oro, siervos y siervas, camellos y asnos.
36
Y Sara, la mujer de mi señor, le dio a luz un hijo a mi señor en su vejez; y mi señor le ha dado a él todo lo que posee.
37
Mi señor me hizo jurar, diciendo: "No tomarás mujer para mi hijo de entre las hijas de los cananeos, en cuya tierra habito;
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sino que irás a la casa de mi padre y a mis parientes, y tomarás mujer para mi hijo."
39
Y dije a mi señor: "Tal vez la mujer no quiera seguirme."
40
Y él me respondió: "El SEÑOR, delante de quien he andado, enviará su ángel contigo para dar éxito a tu viaje, y tomarás mujer para mi hijo de entre mis parientes y de la casa de mi padre;
41
entonces cuando llegues a mis parientes quedarás libre de mi juramento; y si ellos no te la dan, también quedarás libre de mi juramento."
42
Y llegué hoy a la fuente, y dije: "Oh SEÑOR, Dios de mi señor Abraham, si ahora quieres dar éxito a mi viaje en el cual ando,
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he aquí, estoy parado junto a la fuente de agua; que la doncella que salga a sacar agua, y a quien yo diga: 'Te ruego que me des de beber un poco de agua de tu cántaro',
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y ella me diga, 'Bebe, y también sacaré para tus camellos', que sea ella la mujer que el SEÑOR ha designado para el hijo de mi señor."
45
Antes de que yo hubiera terminado de hablar en mi corazón, he aquí, Rebeca salió con su cántaro al hombro, y bajó a la fuente y sacó agua, y yo le dije: "Te ruego que me des de beber."
46
Y ella enseguida bajó el cántaro de su hombro, y dijo: "Bebe, y daré de beber también a tus camellos"; de modo que bebí, y ella dio de beber también a los camellos.
47
Entonces le pregunté: "¿De quién eres hija?" Y ella contestó: "Hija de Betuel, hijo de Nacor, que le dio a luz Milca"; y puse el anillo en su nariz, y los brazaletes en sus manos.
48
Y me postré y adoré al SEÑOR, y bendije al SEÑOR, Dios de mi señor Abraham, que me había guiado por camino verdadero para tomar la hija del pariente de mi señor para su hijo.
49
Ahora pues, si habéis de mostrar bondad y sinceridad con mi señor, decídmelo; y si no, decídmelo también, para que vaya yo a la mano derecha o a la izquierda.
50
Labán y Betuel respondieron, y dijeron: Del SEÑOR ha salido esto; no podemos decirte que está mal ni que está bien.
51
He aquí, Rebeca está delante de ti, tómala y vete, y que sea ella la mujer del hijo de tu señor, como el SEÑOR ha dicho.
52
Y sucedió que cuando el siervo de Abraham escuchó sus palabras, se postró en tierra delante del SEÑOR.
53
Y el siervo sacó objetos de plata, objetos de oro y vestidos, y se los dio a Rebeca; dio también cosas preciosas a su hermano y a su madre.