15
No permitiré que oigas los insultos de las otras naciones y ellas dejarán de burlarse de ti. No serás una tierra que provoque la caída de su propia nación, dice el Señor
Soberano”».
16
Luego recibí este otro mensaje del Señor
:
17
«Hijo de hombre, cuando los israelitas vivían en su propia tierra, la contaminaron con su mala manera de vivir. Para mí, su conducta fue tan impura como el paño menstrual de una mujer.
18
Contaminaron la tierra con homicidios y con la adoración de ídolos,
por eso derramé mi furia sobre ellos.
19
Los esparcí por varios países a fin de castigarlos por su mala manera de vivir;
20
pero esparcidos entre las naciones, deshonraron mi santo nombre. Pues las naciones decían: “¡Estos son el pueblo del Señor
, pero él no pudo protegerlos en su propia tierra!”.
21
Entonces me preocupé por mi santo nombre, al cual mi pueblo trajo vergüenza entre las naciones.
22
»Por lo tanto, da este mensaje a los israelitas de parte del Señor
Soberano: “Los llevaré de regreso a su tierra, pero no porque lo merezcan sino para proteger mi santo nombre, que deshonraron mientras estaban esparcidos entre las naciones.
23
Mostraré cuán santo es mi gran nombre, el nombre que deshonraron entre las naciones. Cuando revele mi santidad por medio de ustedes ante los ojos de las naciones, dice el Señor
Soberano, entonces ellas sabrán que yo soy el Señor
.
24
Pues los recogeré de entre todas las naciones y los haré regresar a su tierra.
25
»”Entonces los rociaré con agua pura y quedarán limpios. Lavaré su inmundicia y dejarán de rendir culto a ídolos.
26
Les daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de ustedes. Les quitaré ese terco corazón de piedra y les daré un corazón tierno y receptivo.
27
Pondré mi Espíritu en ustedes para que sigan mis decretos y se aseguren de obedecer mis ordenanzas.
28
»”Vivirán en Israel, la tierra que hace mucho tiempo di a sus antepasados. Ustedes serán mi pueblo y yo seré su Dios.
29
Los limpiaré de su conducta inmunda. Les daré buenas cosechas de grano y no enviaré más hambrunas a su tierra.
30
Les daré abundantes cosechas de sus árboles frutales y sus campos, y nunca más las naciones vecinas podrán burlarse de su tierra a causa de las hambrunas.
31
Entonces recordarán los pecados que cometieron en el pasado y se avergonzarán de ustedes mismos por todas las cosas detestables que hicieron.
32
Sin embargo, recuerden, dice el Señor
Soberano, que no lo hago porque lo merezcan. ¡Oh Israel, pueblo mío, ustedes deberían estar totalmente avergonzados por todo lo que hicieron!
33
»”Esto dice el Señor
Soberano: cuando yo los limpie de sus pecados, volveré a poblar sus ciudades y se reconstruirán las ruinas.
34
Los campos que estaban vacíos y desolados, a la vista de todos, se cultivarán de nuevo.
35
Cuando los regrese a su tierra, la gente dirá: ‘¡Esta tierra era baldía y ahora se parece al jardín del Edén! ¡Las ciudades abandonadas y en ruinas ahora tienen murallas fuertes y están llenas de gente!’.