22
Entonces David y los que estaban con él cruzaron el río Jordán durante la noche, y todos llegaron a la otra orilla antes del amanecer.
23
Cuando Ahitofel se dio cuenta de que no se había seguido su consejo, ensilló su burro y se fue a su pueblo natal, donde puso sus asuntos en orden y se ahorcó. Murió allí y lo enterraron en la tumba de la familia.
24
Pronto David llegó a Mahanaim. A estas alturas, Absalón había movilizado a todo el ejército de Israel y estaba guiando a sus tropas a través del río Jordán.
25
Absalón había nombrado a Amasa comandante de su ejército para reemplazar a Joab, quien había sido el comandante bajo David. (Amasa era primo de Joab. Su padre era Jeter,
un ismaelita.
Su madre, Abigail, hija de Nahas, era hermana de Sarvia, la madre de Joab).
26
Absalón y el ejército israelita armaron el campamento en la tierra de Galaad.
27
Cuando David llegó a Mahanaim, fue recibido calurosamente por Sobi, hijo de Nahas, que venía de Rabá de los amonitas; por Maquir, hijo de Amiel, de Lodebar; y por Barzilai de Galaad, que era de Rogelim.
28
Ellos trajeron camillas, ollas de cocina, recipientes para servir, trigo y cebada, harina y grano tostado, frijoles, lentejas,
29
miel, mantequilla, ovejas, cabras y queso para David y los que estaban con él porque dijeron: «Todos ustedes deben estar muy hambrientos, cansados y con sed después de su largo caminar por el desierto».