Éxodo 12:22
Tomen luego un manojo de hisopo, mójenlo en la sangre recogida en la palangana, unten de sangre el dintel y los dos postes de la puerta, ¡y no salga ninguno de ustedes de su casa hasta la mañana siguiente!
La Biblia de las Américas (Español) BLA
Éxodo 12:22
Y tomaréis un manojo de hisopo, y lo mojaréis en la sangre que está en la vasija, y mancharéis con la sangre que está en la vasija el dintel y los dos postes de la puerta; y ninguno de vosotros saldrá de la puerta de su casa hasta la mañana.
English Standard Version ESV
Exodus 12:22
Take a bunch of 1hyssop and 2dip it in the blood that is in the basin, and touch 3the lintel and the two doorposts with the blood that is in the basin. 4None of you shall go out of the door of his house until the morning.
La Biblia del Jubileo 2000 JBS
Éxodo 12:22
Y tomad un manojo de hisopo, y mojadlo en la sangre que estará en un lebrillo, y untad el dintel y los dos postes con la sangre que estará en el lebrillo; y ninguno de vosotros salga de las puertas de su casa hasta la mañana
Exodus 12:22
And you shall take a bunch of hyssop, dip it in the blood that is in the basin, and strike the lintel and the two doorposts with the blood that is in the basin. And none of you shall go out of the door of his house until morning.
Nueva Traducción Viviente NTV
Éxodo 12:22
Dejen escurrir la sangre en una vasija, después tomen un manojo de ramas de hisopo y mójenlo en la sangre. Con el hisopo unten la sangre en la parte superior y en ambos lados del marco de la puerta de sus casas. Que nadie salga de la casa hasta la mañana,
La Biblia Reina-Valera (Español) RVR
Éxodo 12:22
Y tomad un manojo de hisopo, y mojadle en la sangre que estará en una jofaina, y untad el dintel y los dos postes con la sangre que estará en la jofaina; y ninguno de vosotros salga de las puertas de su casa hasta la mañana.
Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV
Éxodo 12:22
Y tomad un manojo de hisopo, y mojadlo en la sangre que estará en un lebrillo, y untad el dintel y los dos postes con la sangre que estará en el lebrillo; y ninguno de vosotros salga de las puertas de su casa hasta la mañana.