Deuteronomio 19:6
Es necesario evitar grandes distancias, para que el enfurecido vengador del delito de sangre no le dé alcance y lo mate; aquel hombre no merece la muerte, puesto que mató a su prójimo sin premeditación.
La Biblia de las Américas (Español) BLA
Deuteronomio 19:6
no sea que el vengador de la sangre en el furor de su ira persiga al homicida, y lo alcance porque el camino es largo, y le quite la vida aunque él no merecía la muerte, porque no lo había odiado anteriormente.
English Standard Version ESV
Deuteronomy 19:6
lest the avenger of blood in hot anger pursue the manslayer and overtake him, because the way is long, and strike him fatally, though the man did not deserve to die, since he had not hated his neighbor in the past.
La Biblia del Jubileo 2000 JBS
Deuteronomio 19:6
Para que el vengador {Heb. redentor} de la sangre no vaya tras el homicida, cuando se enardeciere su corazón, y le alcance por ser largo el camino, y le hiera de muerte, no debiendo ser condenado a muerte; por cuanto no tenía enemistad desde ayer ni anteayer con el muerto
Deuteronomy 19:6
lest the avenger of blood, while his anger is hot, pursue the manslayer and overtake him, because the way is long, and kill him, though he was not deserving of death, since he had not hated the victim in time past.
Nueva Traducción Viviente NTV
Deuteronomio 19:6
»Si la ciudad de refugio más cercana quedara demasiado lejos, un vengador enfurecido podría rastrear al que causó la muerte y quitarle la vida. En ese caso, la persona moriría injustamente, porque nunca antes había mostrado enemistad hacia el muerto.
La Biblia Reina-Valera (Español) RVR
Deuteronomio 19:6
No sea que el pariente del muerto vaya tras el homicida, cuando se enardeciere su corazón, y le alcance por ser largo el camino, y le hiera de muerte, no debiendo ser condenado á muerte; por cuanto no tenía enemistad desde ayer ni antes de ayer con el muerto.
Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV
Deuteronomio 19:6
Para que el vengador de la sangre no vaya tras el homicida, cuando se enardeciere su corazón, y le alcance por ser largo el camino, y le hiera de muerte, no debiendo ser condenado a muerte; por cuanto no tenía enemistad desde ayer ni anteayer con el muerto .