1
Salmo 144
Salmo de David.
Alaben al Señor
, mi roca.
Él entrena mis manos para la guerra
y da destreza a mis dedos para la batalla.
2
Él es mi aliado amoroso y mi fortaleza,
mi torre de seguridad y quien me rescata.
Es mi escudo, y en él me refugio.
Hace que las naciones
se sometan a mí.
3
Oh Señor
, ¿qué son los seres humanos para que te fijes en ellos,
los simples mortales para que te preocupes por ellos?
4
Pues son como un suspiro;
sus días son como una sombra pasajera.
5
Abre los cielos, Señor
, y desciende;
toca las montañas para que echen humo.
6
¡Lanza tus rayos y esparce a tus enemigos!
¡Dispara tus flechas y confúndelos!