15 Les digo la verdad, el que no reciba el reino de Dios como un niño nunca entrará en él».
16 Entonces tomó a los niños en sus brazos y después de poner sus manos sobre la cabeza de ellos, los bendijo.
17 El hombre rico
Cuando Jesús estaba por emprender su camino a Jerusalén, un hombre se le acercó corriendo, se arrodilló y le preguntó:
—Maestro bueno, ¿qué debo hacer para heredar la vida eterna?
18 —preguntó Jesús—.
19 pero para contestar a tu pregunta, tú conoces los mandamientos: «No asesines; no cometas adulterio; no robes; no des falso testimonio; no estafes a nadie; honra a tu padre y a tu madre»
.
20 —Maestro —respondió el hombre—, he obedecido todos esos mandamientos desde que era joven.
21 Jesús miró al hombre y sintió profundo amor por él.
—le dijo—.
22 Al oír esto, el hombre puso cara larga y se fue triste porque tenía muchas posesiones.
23 Jesús miró a su alrededor y dijo a sus discípulos:
24 Los discípulos quedaron asombrados de sus palabras. Pero Jesús volvió a decir:
25 De hecho, ¡es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entre en el reino de Dios!».
26 Los discípulos quedaron atónitos.
—Entonces, ¿quién podrá ser salvo? —preguntaron.
27 Jesús los miró fijamente y dijo:
28 Entonces Pedro comenzó a hablar.
—Nosotros hemos dejado todo para seguirte —dijo.
29 —respondió Jesús—,
30 recibirá ahora a cambio cien veces más el número de casas, hermanos, hermanas, madres, hijos y bienes, junto con persecución; y en el mundo que vendrá, esa persona tendrá la vida eterna.
31 Pero muchos que ahora son los más importantes en ese día serán los menos importantes, y aquellos que ahora parecen menos importantes en ese día serán los más importantes.
32 Jesús predice otra vez su muerte
Subían rumbo a Jerusalén, y Jesús caminaba delante de ellos. Los discípulos estaban llenos de asombro y la gente que los seguía, abrumada de temor. Jesús tomó a los doce discípulos aparte y, una vez más, comenzó a describir todo lo que estaba por sucederle.
33 —les dijo—,
34 Se burlarán de él, lo escupirán, lo azotarán con un látigo y lo matarán; pero después de tres días, resucitará».
35 Jesús enseña acerca del servicio a los demás
Entonces Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, se le acercaron y dijeron:
—Maestro, queremos que nos hagas un favor.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Marcos 10:15 En verdad os digo: el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él.

English Standard Version ESV

Mark 10:15 1Truly, I say to you, whoever does not 2receive the kingdom of God like a child shall not enter it."

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Marcos 10:15 De cierto os digo, que el que no recibiere el Reino de Dios como un niño, no entrará en él

King James Version KJV

New King James Version NKJV

Mark 10:15 Assuredly, I say to you, whoever does not receive the kingdom of God as a little child will by no means enter it."

Nueva Versión Internacional NVI

Marcos 10:15 Les aseguro que el que no reciba el reino de Dios como un niño, de ninguna manera entrará en él».

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Marcos 10:15 De cierto os digo, que el que no recibiere el reino de Dios como un niño, no entrará en él.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Marcos 10:15 De cierto os digo, que el que no recibiere el Reino de Dios como un niño, no entrará en él.

Herramientas de Estudio para Marcos 10:15-35