9
Entonces sus hijos le llevaron la sangre, él mojó su dedo en ella y la puso en los cuernos del altar, y después derramó el resto de la sangre al pie del altar.
10
Luego quemó sobre el altar la grasa, los riñones y el lóbulo largo del hígado de la ofrenda por el pecado, tal como el Señor
se lo había ordenado a Moisés.
11
Sin embargo, quemó la carne y la piel fuera del campamento.
12
A continuación, Aarón mató al animal para la ofrenda quemada, y sus hijos le llevaron la sangre, y él la salpicó por todos los lados del altar.
13
Luego ellos le entregaron cada uno de los pedazos de la ofrenda quemada, incluida la cabeza, y los quemó en el altar.
14
Después lavó las vísceras y las patas y las quemó en el altar junto con el resto de la ofrenda quemada.
15
Después Aarón presentó las ofrendas del pueblo. Mató al chivo del pueblo y lo presentó como una ofrenda por el pecado, tal como lo había hecho con la ofrenda por su propio pecado.
16
Luego presentó la ofrenda quemada y la sacrificó en la forma establecida.
17
También presentó la ofrenda de grano y quemó un puñado de la mezcla de harina en el altar, además de la ofrenda quemada habitual de la mañana.
18
Después Aarón mató al toro y al carnero como ofrenda de paz del pueblo, y sus hijos le llevaron la sangre, y él la salpicó por todos los lados del altar.
19
Luego tomó la grasa del toro y del carnero —la grasa de la cola gorda y de la que rodea las vísceras— junto con los riñones y el lóbulo largo del hígado.