8
Por el contrario, aférrense bien al Señor
su Dios como lo han hecho hasta ahora.
9
»Pues el Señor
ha expulsado a naciones grandes y poderosas a favor de ustedes, y hasta ahora nadie ha podido derrotarlos.
10
Cada uno de ustedes hará huir a mil hombres del enemigo, porque el Señor
su Dios pelea por ustedes tal como lo prometió.
11
Así que asegúrense de amar al Señor
su Dios.
12
»Pero si se apartan de él y se aferran a las costumbres de los sobrevivientes de esas naciones que aún quedan entre ustedes y se unen en matrimonio con ellos,
13
entonces tengan por seguro que el Señor
su Dios ya no expulsará a esos pueblos de su tierra. En cambio, ellos serán como una red y una trampa para ustedes, como un látigo en la espalda y como zarzas con espinas en los ojos, y ustedes desaparecerán de la buena tierra que el Señor
su Dios les ha dado.
14
»Dentro de poco moriré, seguiré el camino de todo ser viviente en este mundo. En lo profundo del corazón, ustedes saben que cada promesa del Señor
su Dios se ha cumplido. ¡Ni una sola ha fallado!
15
Pero así como el Señor
su Dios les ha dado las buenas cosas que prometió, también traerá calamidad sobre ustedes si lo desobedecen. Los destruirá hasta eliminarlos por completo de esta buena tierra que les ha dado.
16
Si rompen el pacto del Señor
su Dios al adorar y al servir a otros dioses, su enojo arderá contra ustedes y pronto desaparecerán de la buena tierra que él les ha dado».