7
Detesta el ruido de la ciudad
y no tiene arriero que le grite.
8
Las montañas son su pastizal
donde busca cada brizna de hierba.
9
»¿Acaso aceptará el buey salvaje ser domado?
¿Pasará la noche en tu establo?
10
¿Puedes enganchar un buey salvaje a un arado?
¿Acaso arará un campo para ti?
11
Teniendo en cuenta su fuerza, ¿podrás confiar en él?
¿Puedes irte y confiar en que el buey haga tu trabajo?
12
¿Podrás contar con él para que traiga el grano a tu casa
y lo ponga en tu campo de trillar?
13
»El avestruz agita sus alas con ostentación
pero estas no pueden competir con el plumaje de la cigüeña.
14
El avestruz pone sus huevos en la tierra,
y deja que se calienten en el polvo.
15
No le preocupa que alguien los aplaste
o que un animal salvaje los destruya.
16
Trata con dureza a sus polluelos,
como si no fueran suyos.
No le importa si mueren,
17
porque Dios no le dio sabiduría
ni le dio entendimiento.