13
Desde la eternidad y hasta la eternidad, yo soy Dios.
No hay quien pueda arrebatar a nadie de mi mano;
nadie puede deshacer lo que he hecho».
14
Victoria prometida por el Señor
Esto dice el Señor
, tu Redentor, el Santo de Israel:
«Por tu bien, enviaré un ejército contra Babilonia
y obligaré a los babilonios
a huir en esos barcos de los que están tan orgullosos.
15
Yo soy el Señor
, tu Santo,
el Creador y Rey de Israel.
16
Yo soy el Señor
, que abrió un camino a través de las aguas,
e hizo una senda seca a través del mar.
17
Yo llamé al poderoso ejército de Egipto
con todos sus carros de guerra y sus caballos.
Los sumergí debajo de las olas, y se ahogaron;
su vida se apagó como mecha humeante.
18
»Pero olvida todo eso;
no es nada comparado con lo que voy a hacer.
19
Pues estoy a punto de hacer algo nuevo.
¡Mira, ya he comenzado! ¿No lo ves?
Haré un camino a través del desierto;
crearé ríos en la tierra árida y baldía.
20
Los animales salvajes de los campos me darán las gracias,
y también los chacales y los búhos,
por darles agua en el desierto.
Sí, haré ríos en la tierra árida y baldía,
para que mi pueblo escogido pueda refrescarse.
21
Yo hice a Israel para mí mismo,
y algún día me honrará delante del mundo entero.
22
»Sin embargo, querida familia de Jacob, tú te niegas a pedirme ayuda.
¡Oh Israel, te has cansado de mí!
23
No me has traído ovejas ni cabras para ofrendas quemadas.
No me has honrado con sacrificios,
aun cuando no te he agobiado ni fatigado
con exigencias de ofrendas de granos y de incienso.