4
Permitiré que invadan su país los nómadas de los desiertos orientales. Ellos establecerán su campamento entre ustedes y levantarán carpas en su tierra. Se llevarán el fruto de sus cosechas y se tomarán la leche de sus animales.
5
Convertiré la ciudad de Rabá en un pastizal para camellos y todo el territorio de los amonitas en un lugar de descanso para ovejas y cabras. Entonces ustedes sabrán que yo soy el Señor
.
6
»”Esto dice el Señor
Soberano: dado que ustedes aplaudieron, bailaron y gritaron de alegría por la destrucción de mi pueblo,
7
yo alzaré mi puño de juicio contra ustedes. Los entregaré como botín a muchas naciones. Los eliminaré y dejarán de ser nación, los destruiré por completo. Así sabrán que yo soy el Señor
.
8
Mensaje para Moab
»”Esto dice el Señor
Soberano: dado que los moabitas dijeron que Judá es igual a las demás naciones,
9
les abriré el flanco oriental y destruiré sus gloriosas ciudades fronterizas: Bet-jesimot, Baal-meón y Quiriataim.
10
Entregaré a los moabitas en manos de los nómadas de los desiertos orientales, tal como hice con los amonitas. Es cierto, los amonitas dejarán de ser contados entre las naciones.
11
Del mismo modo, haré caer mi castigo sobre los moabitas. Entonces sabrán que yo soy el Señor
.
12
Mensaje para Edom
»”Esto dice el Señor
Soberano: los edomitas pecaron grandemente al vengarse contra el pueblo de Judá.
13
Por lo tanto, dice el Señor
Soberano, alzaré mi puño de juicio contra Edom. Exterminaré a sus habitantes y a sus animales a filo de espada. Convertiré en una tierra baldía el territorio desde Temán hasta Dedán.
14
Lo llevaré a cabo por medio de mi pueblo Israel. Con enojo los israelitas ejecutarán mi venganza, y los edomitas sabrán que esa venganza es mía. ¡Yo, el Señor
Soberano, he hablado!