1
Plaga de ranas
Entonces el Señor
le dijo a Moisés: «Regresa a ver al faraón y anúnciale lo siguiente: “Esto dice el Señor
: ‘Deja ir a mi pueblo para que me adore.
2
Si te niegas a dejarlo ir, enviaré una plaga de ranas por todo tu territorio.
3
El río Nilo se colmará de ranas. Saldrán del río y se meterán en tu palacio, ¡hasta en tu dormitorio y sobre tu cama! Entrarán en las casas de tus funcionarios y de tu gente. Incluso saltarán en tus hornos y en los recipientes donde amasan tu pan.
4
Las ranas saltarán sobre ti, sobre tu gente y sobre todos tus funcionarios’”».
5
Luego el Señor
le dijo a Moisés: «Dile a Aarón: “Extiende la vara que llevas en la mano sobre los ríos, los canales y las lagunas de Egipto, y haz que aparezcan ranas sobre toda la tierra”».
6
Entonces Aarón extendió su mano sobre las aguas de Egipto, ¡y salieron ranas que cubrieron todo el territorio!
7
Pero los magos pudieron hacer lo mismo con sus artes mágicas, también lograron que aparecieran ranas en la tierra de Egipto.
8
Entonces el faraón mandó llamar a Moisés y a Aarón, y les suplicó:
—Rueguen al Señor
que quite las ranas de mí y de mi gente. Yo dejaré salir a su pueblo para que ofrezca sacrificios al Señor
.
9
—¡Tú fija la hora! —respondió Moisés—. Dime cuándo quieres que ore por ti, por tus funcionarios y por tu gente. Entonces tú y tus casas se librarán de las ranas, y estas quedarán solo en el río Nilo.