1
El lugar de adoración elegido por Dios
»Estos son los decretos y las ordenanzas que debes asegurarte de obedecer cuando vivas en la tierra que te da el Señor
, Dios de tus antepasados. Obedécelos todos los días de tu vida.
2
»Cuando expulses a las naciones que viven allí, deberás destruir todos los lugares donde rinden culto a sus dioses —sobre las cimas de las montañas y de los cerros, y debajo de todo árbol frondoso—;
3
destruye sus altares y destroza sus columnas sagradas. ¡Quema los postes dedicados a la diosa Asera y derriba los ídolos tallados! ¡Borra por completo el nombre de sus dioses!
4
»No adores al Señor
tu Dios de la manera en que esos pueblos paganos rinden culto a sus dioses.
5
Más bien, busca al Señor
tu Dios en el lugar de adoración que él mismo elegirá entre todas las tribus, el lugar donde su nombre será honrado.
6
Allí llevarás tus ofrendas quemadas, tus sacrificios, tus diezmos, tus ofrendas sagradas, las ofrendas para cumplir tus juramentos, tus ofrendas voluntarias y las ofrendas de las primeras crías de tus manadas y rebaños.
7
Allí, en la presencia del Señor
tu Dios, comerás hasta quedar satisfecho junto con tus familias, y te alegrarás por todo lo que hayas logrado gracias a la bendición del Señor
tu Dios.
8
»Tu modelo de adoración tendrá que cambiar. Ahora cada uno hace lo que quiere
9
porque aún no has llegado al lugar de descanso, a la tierra que el Señor
tu Dios te da como preciada posesión.