2 Levanté la vista y vi que había un caballo blanco, y su jinete llevaba un arco, y se le colocó una corona sobre la cabeza. Salió cabalgando para ganar muchas batallas y obtener la victoria.
3 Cuando el Cordero rompió el segundo sello, oí que el segundo ser viviente decía: «¡Ven!».
4 Entonces apareció otro caballo, de color rojo. Al jinete se le dio una gran espada y la autoridad para quitar la paz de la tierra. Y hubo guerra y masacre por todas partes.
5 Cuando el Cordero rompió el tercer sello, oí que el tercer ser viviente decía: «¡Ven!». Levanté la vista y vi un caballo negro, y el jinete llevaba una balanza en la mano.
6 Y oí que una voz que salió de entre los cuatro seres vivientes decía: «Un pan de trigo o tres panes de cebada costarán el salario de un día.
Y no desperdicies
el aceite de oliva y el vino».
7 Cuando el Cordero rompió el cuarto sello, oí que el cuarto ser viviente decía: «¡Ven!».
8 Levanté la vista y vi un caballo de color verde pálido. El jinete se llamaba Muerte y su compañero era la Tumba.
A estos dos se les dio autoridad sobre una cuarta parte de la tierra, para matar con espada, con hambre y con enfermedad
y con animales salvajes.
9 Cuando el Cordero rompió el quinto sello, vi debajo del altar las almas de todos los que habían muerto como mártires por causa de la palabra de Dios y por haber sido fieles en su testimonio.
10 Ellos clamaban al Señor y decían: «Oh Señor Soberano, santo y verdadero, ¿cuánto tiempo hasta que juzgues a la gente de este mundo y tomes venganza de nuestra sangre por lo que nos han hecho?».
11 Entonces a cada uno de ellos se le dio una túnica blanca, y se les dijo que descansaran un poco más hasta que se completara el número de sus hermanos, los consiervos de Jesús que se unirían a ellos después de morir como mártires.
12 Mientras yo miraba, el Cordero rompió el sexto sello, y hubo un gran terremoto. El sol se volvió tan oscuro como tela negra, y la luna se volvió tan roja como la sangre.
13 Entonces las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra como los higos verdes que caen de un árbol cuando es sacudido por el fuerte viento.
14 El cielo fue enrollado como un pergamino, y todas las montañas y las islas fueron movidas de su lugar.
15 Entonces todo el mundo —los reyes de la tierra, los gobernantes, los generales, los ricos, los poderosos, todo esclavo y hombre libre— se escondió en las cuevas y entre las rocas de las montañas.
16 Y gritaban a las montañas y a las rocas: «Caigan sobre nosotros y escóndannos del rostro de aquel que se sienta en el trono, y de la ira del Cordero;
17 porque ha llegado el gran día de su ira, ¿y quién podrá sobrevivir?».

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Apocalipsis 6:2 Miré, y he aquí, un caballo blanco; y el que estaba montado en él tenía un arco; se le dio una corona, y salió conquistando y para conquistar.

English Standard Version ESV

Revelation 6:2 And I looked, and behold, a white horse! And its rider had a bow, and a crown was given to him, and he came out conquering, and to conquer.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Apocalipsis 6:2 Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que estaba sentado encima de él, tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió victorioso, para que también venciera

King James Version KJV

New King James Version NKJV

Revelation 6:2 And I looked, and behold, a white horse. He who sat on it had a bow; and a crown was given to him, and he went out conquering and to conquer.

Nueva Versión Internacional NVI

Apocalipsis 6:2 Miré, ¡y apareció un caballo blanco! El jinete llevaba un arco; se le dio una corona, y salió como vencedor, para seguir venciendo.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Apocalipsis 6:2 Y miré, y he aquí un caballo blanco: y el que estaba sentado encima de él, tenía un arco; y le fué dada una corona, y salió victorioso, para que también venciese.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Apocalipsis 6:2 Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que estaba sentado encima de él, tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió victorioso, para que también venciese.

Herramientas de Estudio para Apocalipsis 6:2-17