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no necesitará más honrar a su padre o a su madre." Y así invalidasteis la palabra de Dios por causa de vuestra tradición.
7
¡Hipócritas! Bien profetizó Isaías de vosotros cuando dijo:
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"ESTE PUEBLO CON LOS LABIOS ME HONRA, PERO SU CORAZON ESTA MUY LEJOS DE MI.
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"MAS EN VANO ME RINDEN CULTO, ENSEÑANDO COMO DOCTRINAS PRECEPTOS DE HOMBRES."
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Y llamando junto a sí a la multitud, les dijo: Oíd y entended:
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no es lo que entra en la boca lo que contamina al hombre; sino lo que sale de la boca, eso es lo que contamina al hombre.
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Entonces, acercándose los discípulos, le dijeron<***>: ¿Sabes que los fariseos se escandalizaron cuando oyeron tus palabras?
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Pero El contestó y dijo: Toda planta que mi Padre celestial no haya plantado, será desarraigada.
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Dejadlos; son ciegos guías de ciegos. Y si un ciego guía a otro ciego, ambos caerán en el hoyo.
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Respondiendo Pedro, le dijo: Explícanos la parábola.
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Y El dijo: ¿También vosotros estáis aún faltos de entendimiento?
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¿No entendéis que todo lo que entra en la boca va al estómago y luego se elimina?
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Pero lo que sale de la boca proviene del corazón, y eso es lo que contamina al hombre.
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Porque del corazón provienen malos pensamientos, homicidios, adulterios, fornicaciones, robos, falsos testimonios y calumnias.
20
Estas cosas son las que contaminan al hombre; pero comer sin lavarse las manos no contamina al hombre.
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Saliendo Jesús de allí, se retiró a la región de Tiro y de Sidón.
22
Y he aquí, una mujer cananea que había salido de aquella comarca, comenzó a gritar, diciendo: Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí; mi hija está terriblemente endemoniada.
23
Pero El no le respondió palabra. Y acercándose sus discípulos, le rogaban, diciendo: Atiéndela, pues viene gritando tras nosotros.
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Y respondiendo El, dijo: No he sido enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel.
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Pero acercándose ella, se postró ante El, diciendo: ¡Señor, socórreme!
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Y El respondió y dijo: No está bien tomar el pan de los hijos, y echárselo a los perrillos.