27
éste es el que ha de venir tras mí, el cual es antes de mí; del cual yo no soy digno de desatar la correa del zapato
28
Estas cosas acontecieron en Betábara, al otro lado del Jordán, donde Juan bautizaba
29
El siguiente día ve Juan a Jesús que venía a él, y dice: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo
30
Este es del que dije: Tras mí viene un Varón, el cual es antes de mí; porque era primero que yo
31
Y yo no le conocía; más para que fuera manifestado a Israel, por eso vine yo bautizando con agua
32
Y Juan dio testimonio, diciendo: Vi al Espíritu que descendía del cielo como paloma, y permaneció sobre él
33
Y yo no le conocía; mas el que me envió a bautizar con agua, aquel me dijo: Sobre quien vieres descender el Espíritu, y que permanece sobre él, éste es el que bautiza con Espíritu Santo
34
Y yo le vi, y he dado testimonio que éste es el Hijo de Dios
35
El siguiente día otra vez estaba Juan, y dos de sus discípulos
36
Y mirando a Jesús que andaba por allí, dijo: He aquí el Cordero de Dios
37
Y los dos discípulos le oyeron hablar, y siguieron a Jesús