8
Los hijos de la tercera generación que les nazcan podrán entrar en la asamblea del SEÑOR.
9
Cuando salgas como ejército contra tus enemigos, te guardarás de toda cosa mala.
10
Si hay en medio de ti un hombre inmundo a causa de una emisión nocturna, debe salir fuera del campamento; no volverá a entrar al campamento.
11
Pero al llegar la tarde se bañará con agua, y cuando se ponga el sol, podrá entrar de nuevo al campamento.
12
Tendrás también un lugar fuera del campamento y saldrás allí;
13
y tendrás entre tus herramientas una pala, y cuando te sientes allá fuera, cavarás con ella, y te darás vuelta para cubrir tu excremento.
14
Porque el SEÑOR tu Dios anda en medio de tu campamento para librarte y para derrotar a tus enemigos de delante de ti, por tanto, tu campamento debe ser santo; y El no debe ver nada indecente en medio de ti, no sea que se aparte de ti
15
No entregarás a su amo un esclavo que venga a ti huyendo de su señor.
16
Contigo habitará en medio de ti, en el lugar que él escoja en una de tus ciudades donde le parezca bien; no lo maltratarás.
17
Ninguna de las hijas de Israel será ramera de culto pagano; tampoco ninguno de los hijos de Israel será sodomita de culto pagano.
18
No traerás la paga de una ramera ni el sueldo de un perro a la casa del SEÑOR tu Dios para cualquier ofrenda votiva, porque los dos son abominación para el SEÑOR tu Dios.