18
¡Ay de los que ansían el día del SEÑOR! ¿De qué os servirá el día del SEÑOR? Será tinieblas, y no luz;
19
como cuando uno huye de un león, y se encuentra con un oso, o va a casa, apoya la mano en la pared, y lo muerde una culebra.
20
¿No será tinieblas el día del SEÑOR, y no luz, oscuridad, y no resplandor?