6
Porque el SEÑOR da la sabiduría, y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia.
7
El guarda el ser a los rectos; es escudo a los que caminan perfectamente,
8
guardando las veredas del juicio, y el camino de sus misericordiosos.
9
Entonces entenderás justicia, juicio, y equidad, y todo buen camino.
10
Cuando la sabiduría entrare en tu corazón, y la ciencia fuere dulce a tu alma,
11
el consejo te guardará, te preservará la inteligencia,
12
para librarte del mal camino, del hombre que habla perversidades;
13
que dejan las veredas derechas, por andar por caminos tenebrosos;
14
que se alegran haciendo mal, que se huelgan en malas perversidades;
15
cuyas veredas son torcidas, y ellos torcidos en sus caminos.
16
Para librarte de la mujer extraña, de la ajena que halaga con sus palabras;