16 Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; y echó de ellos los demonios con la palabra, y sanó a todos los enfermos;
17 para que se cumpliese lo que fue dicho por el profeta Isaías, que dijo: El tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias.
18 Y viendo Jesús gran multitud alrededor de sí, mandó que se fuesen al otro lado del lago .
19 Y llegándose un escriba, le dijo: Maestro, te seguiré adondequiera que fueres.
20 Y Jesús le dijo: Las zorras tienen cavernas, y las aves del cielo nidos; mas el Hijo del hombre no tiene donde recostar su cabeza.
21 Y otro de sus discípulos le dijo: Señor, dame licencia para que vaya primero, y entierre a mi padre.
22 Y Jesús le dijo: Sígueme; deja que los muertos entierren a sus muertos.
23 Y entrando él en un barco, sus discípulos le siguieron.
24 Y he aquí, fue hecho en el mar un gran movimiento, que el barco se cubría de las ondas; mas él dormía.
25 Y llegándose sus discípulos, le despertaron, diciendo: Señor, sálvanos, que perecemos.
26 Y él les dice: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, despierto, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza.
27 Y los hombres se maravillaron, diciendo: ¿Qué hombre es éste, que aun los vientos y el mar le obedecen?
28 Y cuando él llegó a la otra ribera, a la provincia de los gadarenos, le vinieron al encuentro dos endemoniados que salían de los sepulcros, fieros en gran manera, que nadie podía pasar por aquel camino.
29 Y he aquí clamaron, diciendo: ¿Qué tenemos contigo, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá a molestarnos antes de tiempo?
30 Y estaba lejos de ellos un hato de muchos puercos paciendo.
31 Y los demonios le rogaron, diciendo: Si nos echas, permítenos ir a aquel hato de puercos.
32 Y les dijo: Id. Y ellos salieron, y se fueron a aquel hato de puercos; y he aquí, todo el hato de los puercos se precipitó de un despeñadero en el mar, y murieron en las aguas.
33 Y los porqueros huyeron, y viniendo a la ciudad, contaron todas las cosas, y lo que había pasado con los endemoniados.
34 Y he aquí, toda la ciudad salió a encontrar a Jesús. Y cuando le vieron, le rogaban que se fuese de sus términos.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Mateo 8:16 Y al atardecer, le trajeron muchos endemoniados; y expulsó a los espíritus con su palabra, y sanó a todos los que estaban enfermos,

English Standard Version ESV

Matthew 8:16 That evening they brought to him many who were oppressed by demons, and he cast out the spirits with a word and healed all who were sick.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Mateo 8:16 Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; y echó de ellos los demonios con la palabra, y sanó a todos los enfermos

King James Version KJV

Matthew 8:16 When the even was come, they brought unto him many that were possessed with devils: and he cast out the spirits with his word, and healed all that were sick:

New King James Version NKJV

Matthew 8:16 When evening had come, they brought to Him many who were demon-possessed. And He cast out the spirits with a word, and healed all who were sick,

Nueva Traducción Viviente NTV

Mateo 8:16 Aquella noche, le llevaron a Jesús muchos endemoniados. Él expulsó a los espíritus malignos con una simple orden y sanó a todos los enfermos.

Nueva Versión Internacional NVI

Mateo 8:16 Al atardecer, le llevaron muchos endemoniados, y con una sola palabra expulsó a los espíritus, y sanó a todos los enfermos.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Mateo 8:16 Y como fué ya tarde, trajeron á él muchos endemoniados: y echó los demonios con la palabra, y sanó á todos los enfermos;

Herramientas de Estudio para Mateo 8:16-34