5 Antes, todas sus obras hacen para ser mirados de los hombres; porque ensanchan sus filacterias, y extienden los flecos de sus mantos;
6 y aman el primer lugar en las cenas, y las primeras sillas en las sinagogas;
7 y las salutaciones en las plazas, y ser llamados por los hombres Rabí, Rabí.
8 Mas vosotros, no queráis ser llamados Rabí; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo; y todos vosotros sois hermanos.
9 Y vuestro padre no llaméis a nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el cual está en los cielos.
10 Ni seáis llamados maestros; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo.
11 El que es el mayor de vosotros, sea vuestro siervo.
12 Porque el que se ensalzare, será humillado; y el que se humillare, será ensalzado.
13 Mas ¡ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque cerráis el Reino de los cielos delante de los hombres; que ni vosotros entráis, ni a los que están entrando dejáis entrar.
14 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque coméis las casas de las viudas, y por pretexto hacéis larga oración; por esto llevaréis mas grave juicio
15 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque rodeáis el mar y la tierra por hacer un prosélito; y cuando fuere hecho, le hacéis hijo del quemadero dos veces más que vosotros.
16 ¡Ay de vosotros, guías ciegos! Que decís: Cualquiera que jurare por el Templo es nada; mas cualquiera que jurare por el oro del Templo, deudor es.
17 ¡Insensatos y ciegos! Porque ¿cuál es mayor, el oro, o el Templo que santifica al oro?
18 Y: Cualquiera que jurare por el altar, es nada; mas cualquiera que jurare por el presente que está sobre él, deudor es.
19 ¡Insensatos y ciegos! Porque, ¿cuál es mayor, el presente, o el altar que santifica al presente
20 Pues el que jurare por el altar, jura por él, y por todo lo que está sobre él;
21 y el que jurare por el Templo, jura por él, y por Aquel que habita en él
22 y el que jura por el cielo, jura por el trono de Dios, y por Aquel que está sentado sobre él.
23 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejasteis lo que es lo más importante de la ley: el juicio y la misericordia y la fe; esto era necesario hacer, y no dejar lo otro.
24 ¡Guías ciegos, que coláis el mosquito, mas tragáis el camello!
25 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque limpiáis lo que está de fuera del vaso o del plato; mas por dentro están llenos de robo y de incontinencia.
26 ¡Fariseo ciego, limpia primero lo de dentro del vaso y del plato, para que también lo de fuera se haga limpio!
27 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda suciedad.
28 Así también vosotros por fuera, a la verdad, os mostráis justos a los hombres; mas por dentro, llenos estáis de hipocresía e iniquidad.
29 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque edificáis los sepulcros de los profetas, y adornáis los monumentos de los justos,
30 y decís: Si estuviéramos en los días de nuestros padres, no hubiéramos sido sus compañeros en la sangre de los profetas.
31 Así que, testimonio dais a vosotros mismos, que sois hijos de aquellos que mataron a los profetas.
32 ¡Vosotros también llenad la medida de vuestros padres!
33 ¡Serpientes, generación de víboras! ¿Cómo evitaréis el juicio del quemadero?
34 Por tanto, he aquí, yo envío a vosotros profetas, y sabios, y escribas; y de ellos, a unos mataréis y colgaréis de un madero, y a otros de ellos azotaréis en vuestras sinagogas, y perseguiréis de ciudad en ciudad.
35 Para que venga sobre vosotros toda la sangre justa que se ha derramado sobre la tierra, desde la sangre de Abel el justo, hasta la sangre de Zacarías, hijo de Berequías, al cual matasteis entre el Templo y el altar.
36 De cierto os digo que todo esto vendrá sobre esta generación
37 ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas a los que son enviados a ti! ¡Cuántas veces quise juntar tus hijos, como la gallina junta sus pollos debajo de las alas, y no quisiste!
38 He aquí vuestra Casa os es dejada desierta
39 Porque os digo que desde ahora no me veréis, hasta que digáis: Bendito el que viene en el nombre del Señor.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Mateo 23:5 Sino que hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres; pues ensanchan sus filacterias y alargan los flecos de sus mantos;

English Standard Version ESV

Matthew 23:5 They do all their deeds to be seen by others. For they make their phylacteries broad and their fringes long,

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Mateo 23:5 Antes, todas sus obras hacen para ser mirados de los hombres; porque ensanchan sus filacterias, y extienden los flecos de sus mantos

King James Version KJV

New King James Version NKJV

Matthew 23:5 But all their works they do to be seen by men. They make their phylacteries broad and enlarge the borders of their garments.

Nueva Traducción Viviente NTV

Mateo 23:5 »Todo lo que hacen es para aparentar. En los brazos se ponen anchas cajas de oración con versículos de la Escritura, y usan túnicas con flecos muy largos.

Nueva Versión Internacional NVI

Mateo 23:5 »Todo lo hacen para que la gente los vea: Usan filacterias grandes y adornan sus ropas con borlas vistosas;

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Mateo 23:5 Antes, todas sus obras hacen para ser mirados de los hombres; porque ensanchan sus filacterias, y extienden los flecos de sus mantos;

Herramientas de Estudio para Mateo 23:5-39