4
Porque pasados aún siete días, yo haré llover sobre la tierra cuarenta días, y cuarenta noches; y raeré toda sustancia que hice de sobre la faz de la tierra.
5
E hizo Noé conforme a todo lo que le mandó el SEÑOR.
6
Y siendo Noé de seiscientos años, el diluvio de las aguas fue sobre la tierra.
7
Y vino Noé, y sus hijos, y su mujer, y las mujeres de sus hijos con él al arca, por las aguas del diluvio.
8
De los animales limpios, y de los animales que no eran limpios, y de las aves, y de todo lo que anda arrastrándose sobre la tierra,
9
De dos en dos entraron a Noé en el arca: macho y hembra, como mandó Dios a Noé.
10
Y fue, que al séptimo día las aguas del diluvio fueron sobre la tierra.
11
El año seiscientos de la vida de Noé, en el mes segundo a los diecisiete días del mes; aquel día fueron rotas todas las fuentes del grande abismo, y las ventanas de los cielos fueron abiertas;
12
y hubo lluvia sobre la tierra cuarenta días y cuarenta noches.
13
En este mismo día entró Noé, y Sem, y Cam y Jafet, hijos de Noé, la mujer de Noé, y las tres mujeres de sus hijos con él en el arca;
14
ellos y todos los animales según sus especies, y todas las bestias según sus especies, y todo animal que anda arrastrándose sobre la tierra según su especie, y toda ave según su especie, todo pájaro, toda cosa de alas.
15
Y vinieron a Noé al arca, de dos en dos, de toda carne, en que había espíritu de vida.
16
Y los que vinieron, macho y hembra de toda carne vinieron, como le había mandado Dios: y cerró Dios sobre él.
17
Y fue el diluvio cuarenta días sobre la tierra; y las aguas se multiplicaron, y alzaron el arca, y fue alzado de sobre la tierra.
18
Y prevalecieron las aguas, y se multiplicaron en gran manera sobre la tierra; y andaba el arca sobre la faz de las aguas.
19
Y las aguas prevalecieron mucho en gran manera sobre la tierra; y todos los montes altos que había debajo de todos los cielos, fueron cubiertos.
20
Quince codos encima prevalecieron las aguas; y fueron cubiertos los montes.
21
Y murió toda carne que anda arrastrándose sobre la tierra, en las aves, y en las bestias, y en los animales, y en toda criatura que anda arrastrándose sobre la tierra, y en todo hombre;
22
todo lo que tenía aliento de espíritu de vida en sus narices, de todo lo que había en la tierra, murió.
23
Así rayó toda la sustancia que había sobre la faz de la tierra, desde el hombre hasta la bestia, hasta el animal, y hasta el ave del cielo; y fueron raídos de la tierra; y quedó solamente Noé, y los que con él estaban en el arca.
24
Y prevalecieron las aguas sobre la tierra ciento cincuenta días.